Los irlandeses nos sacan los colores
La película ‘Armada 1588: Naufragio y supervivencia’ relata la gesta del capitán español Francisco de Cuéllar cuyo barco encalló frente a las costas de Irlanda tras fracasar la invasión de Inglaterra
Los ingleses nos dieron una enorme paliza; los irlandeses, ahora una inmensa lección de respeto y honor hacia los más de mil españoles muertos en las playas de Streedagh (Irlanda) el 21 de septiembre de 1588. Ese día, tres grandes naves de la conocida como Armada Invencible (la Juliana, la Lavia y la Santa María de Visón de Ragusa) encallaron próximas a Grange, una localidad del condado de Sligo, al noroeste de Irlanda, tras fracasar la invasión de Inglaterra ordenada por Felipe II.
Y es que en Irlanda es más conocida y respetada que en España la figura del capitán Francisco de Cuéllar, cuya gesta ahora ha dado lugar a la película Armada 1588: Naufragio y supervivencia, dirigida por Al Butler, protagonizada por el actor Fernando Corral (Alicante, 41 años), financiada por el Departamento de Desarrollo de Comunidades Locales del Consejo del Condado de Sligo y promovida por la asociación Spanish Armada Ireland.
De Cuéllar era uno de los soldados que viajaba en aquellas tres desgraciadas naves arrastradas hacia el país de san Patricio por una descomunal tormenta. Nada más poner pie en tierra, los integrantes de la Grande y Felicísima Armada (lo de Invencible se lo inventaron los ingleses y nosotros lo asumimos sin rechistar) sufrieron una emboscada de las tropas de la reina Isabel I y prácticamente todos fueron asesinados. Rematados en las playas, perseguidos a través de los bosques o colgados de las vigas de las iglesias, menos de cien soldados lograron sobrevivir gracias a la ayuda de los jefes locales irlandeses O’Rourke y McClancy, que los acogieron, curaron y protegieron, y a los que a su vez esta acción les costó la vida cuando fueron descubiertos por ingleses.
“Es una historia verdaderamente increíble,” dice Eddie O’Gorman, presidente de Spanish Armada Ireland. “El testimonio escrito que De Cuéllar dejó atrás es una parte muy importante de la historia y la base de esta película”. Porque el oficial español relató, tras permanecer oculto siete meses en Irlanda, lo sucedido, incluida su defensa de la torre de los O’Rourke frente a unas tropas muy superiores en armamento y número. Se negó a huir cuando los ingleses descubrieron su escondite.
Todos los años, Grange celebra a finales de septiembre un homenaje a españoles e irlandeses fallecidos en combate o ejecutados sin piedad. Los vecinos plantan 1.100 cruces en la playa de Streedaghen en su recuerdo. El municipio, incluso, ha abierto un museo de dedicado a la Gran Armada -se niegan a aceptar el humillante apodo de Invencible- que recibirá los beneficios económicos de este filme estrenado este viernes 22.
El mediometraje –en la que se mezclan recreaciones informáticas y personajes reales de una manera más que aceptable- no ganará un Oscar de Hollywood en ninguna categoría, pero sí el emocionado aplauso de los que no se sienten avergonzados de su historia. Los irlandeses, por ejemplo. Vergüenza nos debía dar que la hayan rodado ellos primero. Inmenso bochorno.
Armada 1588: Naufragio y Supervivencia. (Duración 27 min). Disponible su descarga en SpanishArmadaIreland.com. 4,99 euros.
Babelia
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