_
_
_
_

Depedro canta a la infancia

El músico publica 'Érase una vez', un trabajo dedicado a los niños y a la experiencia de ser padre

Andrea Nogueira Calvar
Depedro, Jairo Zavala, en los estudios de Warner Music.
Depedro, Jairo Zavala, en los estudios de Warner Music.santi burgos

Puede que este sea un disco un poco más Jairo Zavala (Madrid, 1973) y menos Depedro, aunque el músico defiende que su sello está envuelve todas las canciones. “Sé que no es lo esperado”, reconoce el artista. Érase una vez es un álbum dedicado al mundo de la infancia, pero no exclusivo para él, que publica un año después de festejar con amigos sus 10 años de carrera.

La experiencia de ser padre –tiene tres hijos- le ha hecho ver que existen pocas propuestas de música dedicada a los niños y que no pequen “de condescendientes o de tratar a los niños como si tuvieran alguna tara”. Depedro ha preparado una aventura con mares y desiertos, un dragón alado y reclamos tanto de padres como de hijos. Para el viaje se ha ayudado de ukeleles, violas, violines, sintetizadores, fagots, cajón... incluso un bombo legüero al que le ha dado un uso un poco “bastardo”, dice, porque siendo propio del folclore argentino lo utiliza para tocar una melodía peruana, país al que está ligado a través de su padre.

Más información
Glen Hansard: el irlandés errante
El pulso africano que late en la música de Depedro

Su inspiración ha sido su propia familia y su entorno más cercano. Ha rascado en el folclore de Perú y otros países americanos, “un tesoro inagotable”. Ha robado alguna que otra frase a sus hijos, por las que le han pedido royalties, y hasta los ha hecho cantar. Advierte también que quizás en algunos sonidos se note su edad, pues ha tirado de las referencias de los musicales de los años 70.

También ha ahondado en su propia infancia, rescatando una nana que le cantaba su abuela y que vierte en A mimi. A ella y a su abuelo achaca los recuerdos de los primeros cuentos. “Él se inventaba que tenía una fábrica donde podía construir objetos mágicos para llegar a la luna y cosas así”. Su creatividad ha explotado en este trabajo, como solo le ocurre a los adultos que tratan con niños, que deben desatascar la imaginación y eliminar filtros para ponerse al nivel de los más pequeños.

La generosidad sonora define este trabajo conceptual, al que le ha dado una pátina colectiva para que cualquiera con empatía hacia el mundo infantil pueda disfrutarlo. “Me asombra que no haya más contenido de este estilo”, valora, destacando que para él ser padre ha sido un proceso “definitorio y maravilloso”.

El directo de Érase una vez estará también pensado para la infancia. Aunque todavía trabaja en la puesta escena, Depedro pretende crear “una especie de obra de teatro” que sea “más una experiencia que un concierto” tanto para adultos como para niños.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Sobre la firma

Andrea Nogueira Calvar
Redactora en EL PAÍS desde 2015. Escribe sobre temas de corporativo, cultura y sociedad. Ha trabajado para Faro de Vigo y la editorial Lonely Planet, entre otros. Es licenciada en Filología Hispánica y máster en Periodismo por la Escuela de Periodismo UAM-EL PAÍS.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_