Un ‘Fuenteovejuna’ africano y feminista
Una compañía teatral de Costa de Marfil representa por primera vez una obra del Siglo de Oro en el Festival de Almagro
Era un tesoro escondido que comienza a aflorar. El teatro del Siglo de Oro español se abre camino por primera vez en el continente africano. Una compañía de Costa de Marfil estrena el Fuenteovejuna de Lope de Vega en el Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro. El montaje, un espectáculo lleno de colorido, música y danza, con los instrumentos de percusión como único elemento escénico, se representa en Almagro el viernes y el sábado (22.45 horas) para luego saltar a las calles de Ciudad Real el domingo. Bajo la dirección de escena de Vaga Obou de Sales y Luis Marqués, un dramaturgo catalán (1966) afincado en Costa de Marfil desde hace más de 25 años, cuatro actores y cuatro actrices dan vida a esta versión africana, en francés, del drama que Lope escribió sobre la rebelión de un pueblo de Córdoba que, en 1476, se alzó unido contra la tiranía cruel del comendador gobernante.
El título elegido para esta versión, Fuenteovejuna, el valor de las mujeres, realizada por José Gabriel López Antuñano y que cuenta también con la dirección artística de Ignacio García, el responsable del certamen de Almagro, dice mucho sobre lo que los espectadores van a saborear sobre el escenario, una obra combativa y feminista. En el aeropuerto de Madrid Barajas, de camino a Almagro, el director Luis Marqués habla de la facilidad con la que este drama universal se ha adaptado a la realidad actual de Costa de Marfil y el resto de países africanos.
“Los abusos de los jefes de guerra, tanto en el poder como los rebeldes, se igualan a la crueldad del comendador de Fuenteovejuna. Las mujeres siguen siendo trofeos de guerra, las violaciones forman parte del genocidio étnico y colectivo en los conflictos. A todo esto se añade la lucha diaria de la mujer africana por su libertad. Hay cada día más mujeres heroínas en este continente”, explica Marqués, quien resalta también el hecho de que esta versión ha buscado el equilibrio de la igualdad con la elección de cuatro actores y cuatro actrices. “Un deseo firme desde el inicio del proyecto era buscar ese símbolo o ejemplo de igualdad que buscamos en nuestra sociedad africana y contemporánea”, asegura el dramaturgo que ya habla de sí mismo como un ciudadano de Costa de Marfil.
Se respira en este montaje un respeto absoluto por la fábula de Lope de Vega, incluidos muchos de los textos originales, a la que se han incorporado muchas de las ricas y coloridas tradiciones artísticas y contemporáneas del país africano. “Las danzas de Abiyán, una ciudad dinámica en la que cada poco tiempo surgen ritmos nuevos y formas de bailar, están reflejadas en esta obra teatral, en la que los actores interpretan, bailan y cantan. Se podría decir que Fuenteovejuna, el valor de las mujeres es algo así como una ópera o espectáculo musical. Es toda una aventura estética. Hemos querido darle un tono diferente y sorprendente, a lo que contribuye también esa mezcla de colores vibrantes de las telas del vestuario. Es una obra con un acento muy africano, en la que hemos utilizado toda la simbología de las danzas modernas de las mujeres para humillar simbólicamente al poder del comendador”.
Es Fuenteovejuna, el valor de las mujeres algo más que un grito africano por la liberación de la mujer. El descubrimiento del teatro del Siglo de Oro en Costa de Marfil, un país francófono del África subsahariana con una dramaturgia más dominante de Francia o Inglaterra, se vive en esta compañía teatral con un gran entusiasmo y alegría. “Es una obra maravillosa que puede ser vista por los sordos y escuchada por los ciegos”, asegura el actor Philipe Kouakou.
Babelia
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