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La baronesa Thyssen subastará tres piezas de arte asiático

La venta de las obras se produce en medio de los problemas económicos de la coleccionista

La baronesa Carmen Thyssen-Bornemisza en Sant Feliu de Guíxols, en julio.
La baronesa Carmen Thyssen-Bornemisza en Sant Feliu de Guíxols, en julio.Europa Press
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La casa Christie’s subastará este miércoles en Nueva York tres obras de arte asiático de la colección de la baronesa Carmen Thyssen-Bornemisza. En concreto, se trata de una figura de bronce de Buda del siglo XIII o XIV, con un precio de salida entre los 497.000 y los 663.000 euros; una estela de piedra negra de Uma-Maheshvara del siglo IX, cuyo precio de salida oscila entre los 83.000 y los 125.000 euros; y una figura de bronce de Sambandar, que saldrá con un valor de entre 497.000 y 663.000 euros.

Esta subasta se produce dos meses después de que la baronesa ampliara el plazo de cesión de su colección con el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte hasta el 31 de diciembre. Se trata de la tercera prórroga de este año. La primera ocurrió a principios de año y finalizó el 30 de abril. Posteriormente acordaron otro aplazamiento que culminaba el pasado mes de julio.

A comienzos de año, la baronesa Thyssen-Bornemisza había advertido de que estaría dispuesta a vender piezas de su colección a causa de los problemas económicos que atravesaba. "Yo lo que no puedo asumir es no tener liquidez. Necesito liquidez y si no, tendré que vender otro cuadro y lo siento mucho como coleccionista. Necesito liquidez", declaró en febrero. Para evitarlo, solicitaba al Estado una mayor “movilidad” de su colección y “poner orden” a su situación fiscal para asegurar el futuro de sus herederos.

Ya en marzo había sugerido que pondría a la venta el cuadro Caballos de carreras en un paisaje, del impresionista francés Edgar Degas, para resolver sus “problemas de liquidez más inmediatos”. La baronesa insistía en que a pesar de tener una fortuna en obras de arte, el mantenimiento de su colección resultaba muy costoso. Por lo tanto esperaba poder subastar la pieza por una suma similar a la que obtuvo en 2012, cuando vendió La esclusa, de John Constable, por 27,9 millones de euros. Pero unos días después negó que quisiera venderlo, aunque admitió que había recibido ofertas y que podría vender “alguna otra obra”.

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