En cualquier canon de la canción de amor Caetano Veloso es invencible
La sección 'Recetario de canciones' recomienda música al acabar cada mes y, sobre todo, busca que la vida suene mejor
Fue protagonista. In my life - George Martin
Fue triste protagonista en marzo. El conocido como quinto beatle, George Martin, falleció a los 90 años de edad. Su contribución fue esencial para explicar la mejor parte de la impactante frescura de la banda más famosa de la historia. Contrapunto estético con su estilo de oficinista ante la irreverencia divina de los Beatles, su visión a los mandos del sonido sirvió para moldear un cancionero fabuloso. Nos quedamos con esta preciosidad llamada In My Life, en la que Martin tocó el piano. ¿Puede uno cansarse de los Beatles? La respuesta es NO.
Una canción para una noticia. Chimes of Freedom - Youssou N`Dour
También fueron (y son) tristes protagonistas las decenas de miles de refugiados que se encuentran atrapados en Grecia por el cierre de las fronteras balcánicas. Su situación lleva siendo noticia desde hace mucho tiempo, pero cobró especial relevancia ante el pacto migratorio UE-Turquía. Por ellos, suena esta composición de Bob Dylan, Chimes of Freedom, uno de los grandes himnos musicales por los abandonados. Como reza la canción, “las campanas de la libertad están centelleando por los refugiados en su desarmado camino de huida”. Y nos quedamos con esta fantástica versión de Youssou N`Dour. El senegalés es una de las gargantas más espectaculares del continente africano y al mismo tiempo embajador de sus miserias a través de sus canciones. Por eso, no dudó en tomar prestado el imperecedero canto por la libertad y la justicia de Dylan.
Disco destacado. Memory - Violent Femmes
La banda de Milwaukee ha regresado y lo ha hecho con todas las credenciales intactas. Violent Femmes fueron nuestro disco de la semana, recibiendo una calificación de 8 sobre 10. En palabras de Juanp Holguera, quien escribió sobre el álbum en la sección de Música, "las canciones funcionan como si la felicidad y la juerga de los primeros días siguiera vigente en las filas del grupo". Conviene señalarlo: estos chicos fueron en los ochenta un fascinante rara avis en el country alternativo, con su estética bastarda y su chulería folk-rock. Es una obviedad decir que si se hubiesen presentado hoy a un concurso de esos de talento de la televisión no hubiesen pasado ni el primer corte. Menos mal que estos concursos no valen para nada.
Territorio nacional. Estoy gordo - Luis Prado
Durante mucho tiempo ha estado a los teclados de Señor Mostaza, pero ahora Luis Prado se lanza en solitario y lo hace con un señor disco de presentación: Mis terrores favoritos. Pura elegancia pop. Con fina ironía, Prado aborda la vida cotidiana bajo un prisma de exquisita melancolía. El teclista se postula para ser nuestro Randy Newman particular. Y la siguiente canción directamente lo hace para ser un auténtico himno generacional. Solo hace falta mirarse en el espejo de su letra: "Estoy gordo... no sé que pudo ser... Estoy calvo y me pregunto qué fue".
La Ruta Norteamericana. Lets Kill Saturday Night - Robbie Fulks
El bluegrass es ese género que bebe por igual del blues y el country rural y Robbie Fulks es uno de sus mejores representantes en la actualidad. Está claro que entre tanta tendencia musical y hype este tipo parece un reliquia, pero poco debería importar si es capaz de conmover con su bluegrass afilado. Si antes se citaban a los Violent Femmes, ahora se reivindica a Fulks, que acaba de publicar un notable disco, Upland South, producido por Steve Albini. Es más real que las costillas de salsa barbacoa.
¡No te pierdas este vídeo! The Man Who Sold The World - Michael Stipe
No es la mejor versión del clásico de David Bowie, pero es una versión con el sello de Michael Stipe, vocalista de R.E.M. El vídeo de su actuación en el programa televisivo de Jimmy Fallon corrió como la pólvora en Internet no sólo por el tributo al músico fallecido sino también por las pintas de Stipe. A medio camino entre un ermitaño de las carvernas y un hipster de redoble de tambor, el cantante de R.E.M. volvió a demostrar que tiene la virtud de ser una persona magnética, con un estilo propio, incluso con su nuevo look de frondosa barba y pendiente en la nariz.
¡Por fin es viernes! What I Like About You - The Romantics
La primavera asoma y eso siempre mejora nuestra estimación de la vida. Y si encima es viernes pues ya muchos salen de la oficina con ganas de comerse el mundo. Algunos incluso se lo beben en el fin de semana. Otros lo queman, por ejemplo, bailando. The Romantics, abanderados del power-pop, invitan a todo ello. La banda de Detroit cogió la herencia del beat británico sesentero de The Who, The Rolling Stones o The Kinks y, como un buen puñado de formaciones de los setenta posteriores, lo mantuvieron vivo. Guitarrazos y actitud. Este clásico del primer power-pop (guitarras, guitarras, guitarras y más guitarras) se te mete por el cuerpo y te electrifica. Volverás a escucharlo en cuanto acaben sus 2 minutos y 55 segundos.
Díselo con una canción. Você é linda - Caetano Veloso
Octavio Paz escribió que "un mundo nace cuando dos se besan". Sin abandonar el venazo poético, tan propio del amor, se puede decir que un mundo nace cuando dos comparten una canción de Caetano Veloso. Você é linda es todo un modelo perfecto de las canciones de amor. Y lo es porque la canta Caetano, que en su catálogo tiene un par de decenas indiscutibles. Si la vida sonara siempre como sus canciones, existirían la paz mundial y el amor eterno. En cualquier canon de la canción de amor Caetano Veloso es invencible. La vida necesita que sus canciones, como esta, tengan su espacio imponiéndose a los vendedores de pompas fúnebres, a los charlatanes y a las canciones de Celine Dion. Un consejo: ya le estás regalando un disco de Caetano Veloso a él/ella. Piensa que la vida son dos días.
De la vieja gramola. Canto a La Habana - Bebo Valdés
Vivimos tiempos locos (también salvajes, que cantarían Ilegales). Muchos volvieron a llorar la muerte (por segunda vez) de Bebo Valdés cuando los medios de comunicación tiraron de hemeroteca para recordar su fallecimiento. "¡Oh, no, Bebo ha muerto!", gritaron en el ciberespacio. Pero Bebo, como Miliki, Lola Flores y Lou Reed, por desgracia, ya estaba muerto. Vivimos una época en la que se puede morir más de una vez y nunca descansar. A lo mejor un día vamos a explotar en las redes sociales de tanto absurdo. Y, mientras tanto, todo esto sucedió cuando se producía la histórica visita de Barack Obama a Cuba. El gran Bebo Valdés se anticipó a este deshielo de las relaciones entre la isla y la primera potencia mundial y con su jazz impregnado de mambo, son, guaracha y batanga acercó las dos orillas alejadas más que nunca por la Guerra Fría. Por eso, de nuestra vieja gramola recuperamos este clásico, Canto a La Habana, que han versionado todas las voces cubanas importantes. Si el consejo con la canción de Caetano Veloso puede ser importante, más lo es el que nos dejó el irrepetible pianista cubano. Cita textual de Bebo: "Cuando yo muera, no quiero que nadie llore. Quiero que hagáis una fiesta y bailéis y os emborrachéis”. Y que suenen sus canciones. Amén.
Babelia
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