Premios Arte y Mecenazgo para Carlos León, De Osma y el Archivo Lafuente

La Fundación Arte y Mecenazgo, que presidió con mano de seda y puño de hierro el empresario y mecenas barcelonés Leopoldo Rodés hasta su muerte en accidente en julio del año pasado, continua empeñada en su misión: “Dignificar el arte” y “mejorar su percepción pública”, en palabras de su directora, Mercedes Basso. El artista Carlos León, la galería Guillermo de Osma y la colección Archivo Lafuente han sido distinguidos hoy con los premios de la Fundación en su séptima entrega, que recibirán el próximo 31 de mayo. Unos premios nacidos en 2011 que simbolizan cada año la vocación de esta institución: dar visibilidad a la labor de los distintos agentes que forman parte de la cadena de la creación artística, a saber, los creadores, los galeristas y los coleccionistas.

Más allá de la evidente condición de ejercicio de mecenazgo por parte de la Fundación La Caixa, estos galardones, dotados globalmente con 90.000 euros (50.000 en el capítulo de artista y 40.000 en el de galerista) además de una escultura de Miquel Barceló en la edición de este año, suelen convertirse en recurrente grito de alarma en defensa del sector.

En el almuerzo del año pasado, el hoy desaparecido Leopoldo Rodés ya lanzó la alerta, en forma de denuncia –elegante pero demoledora- contra la pasividad política en la consecución (mejor, la no-consecución) de una ley de mecenazgo capaz de situar a España al nivel de otros países del entorno. Y hoy el tema ha vuelto a la mesa, cuando el galerista Guillermo de Osma (Bilbao, 1953), uno de los grandes marchantes españoles de arte del siglo XX desde la galería de la madrileña calle Claudio Coello que cumple ahora sus 25 años, lo ha dejado así de claro: "En España sigue habiendo asignaturas pendientes con respecto al arte, por ejemplo, la Ley de Mecenazgo, rechazada por todos los partidos. Bueno, hay que decir que en este país el interés de los políticos por la cultura es mínimo, desde Fuerza Nueva hasta Podemos aquí nadie habla de cultura, no lo hicieron en la campaña. Lamentable”.

“Aún se habla despectivamente del arte contemporáneo, es como si hubiera una especie de rechazo a entenderlo… pero somos un reflejo del país que tenemos, partimos de un retraso secular, no hay educación, hay que evolucionar, pero esto es cosa de varias generaciones”, ha añadido José María Lafuente (Lugo, 1957), fundador del Archivo Lafuente, un ingente y valioso fondo de 120.000 documentos originales y 2.000 obras de arte entre pintura, escultura y obra gráfica. Lafuente recibe el premio “por su compromiso y su asombrosa visión” como coleccionista. Recientemente ha firmado un acuerdo de colaboración con el Museo Reina Sofía para la puesta en marcha de proyectos comunes.

Aún más ácido y crítico con el estado de cosas en la relación entre el arte y la sociedad española se ha mostrado el pintor Carlos León (Ceuta, 1948), premiado por “su exploración del color, la textura y la superficie”: “España, en términos de arte, pasó sin transición del Museo del Prado al Museo Reina Sofía, con una ausencia casi total de lo que fue el arte moderno. Así que no hay un paladar educado. Hay un enorme déficit, hay un abismo. Aquí, a un crítico de arte joven le hablas de Monet o de Matisse y cree que estás loco. Pero es que los políticos han abandonado definitivamente esto de la cultura cuando han visto que atañe a dos docenas de votos”.