Treinta años de viajes temporales en el DeLorean
El aniversario del filme ‘Regreso al futuro’ se celebra con una proyección-concierto
"Yo no podría tocar algo que es perfecto, y Regreso al futuro, como película, lo es”. El defensor del tótem de los ochenta es el compositor Alan Silvestri, creador de la música de 15 de las películas de Robert Zemeckis y por supuesto, de la trilogía protagonizada por Marty McFly y Doc Brown. Hace ya 30 años que el DeLorean viaja por el tiempo alimentado por plutonio, y en homenaje a ese aniversario se han programado conciertos en todo el mundo: mañana sábado les toca a París y Madrid, y posteriormente se celebrarán en diversas ciudades europeas y estadounidenses.
En Madrid se realizará en el Palacio Vistalegre Arena de Madrid, devenido en una sala de cine para esta proyección-concierto con la Film Symphony Orchestra —dirigida por Constantino Martínez— ante 10.000 personas. El evento durará más que la película, y se alargará a las dos horas y media, con descanso, porque Silvestri ha compuesto 25 minutos de música nueva que se escucharán de obertura y en el entreacto. Buen regalo para los amantes de un clásico de la ciencia-ficción que hace 30 años llevó a un chaval a viajar en el tiempo otros 30 años, a la época en que sus padres estudiaban en el instituto, para salvar su propia existencia.
Así que, volviendo a Silvestri, el padre putativo del show, el compositor de aquella estupenda banda sonora, ¿por qué 25 minutos nuevos? Por teléfono, el neoyorquino, de 65 años, se defiende: “Bueno, porque cuando empezamos este proyecto de los conciertos vimos que había bastantes minutos en el filme sin música, que solo como concierto necesitaba más partitura. No se ha tocado nada del original. En Madrid ustedes verán la película y escucharán la música, un estupendo cóctel. Sé que el maestro Constantino va a tener una noche complicada [risas]”.
Como guardián de un mito imperecedero, Silvestri entiende que no puede dar pasos en falso. De ahí que lleve años trabajando para la adaptación de Regreso al futuro a un musical de Broadway junto a Zemeckis y Bob Gale (guionistas del filme), y el músico Glen Ballard... sin que aún se sepa mucho. “Estamos en ello desde hace una década. Pero es que sabemos que manejamos un material muy delicado y que tenemos que estar a la altura de un icono del cine. Hasta que no estemos orgullosos de la obra no mostraremos nada”.
Silvestri —compositor de las bandas sonoras de, entre otras, Depredador, Abyss, El guardaespaldas, Lilo & Stich, Los Croods o Los vengadores, y dos veces candidato al Oscar con Forrest Gump y Polar Express— disfruta rememorando aventuras de mediados de los ochenta. “Era mi segunda película con Bob [Robert Zemeckis], para quien ya había compuesto Tras el corazón verde. Pero Regreso al futuro suponía un salto estilístico grande. Para él y desde luego para mí, porque requería una partitura con mayor orquestación. Estaba muy asustado, casi diría aterrorizado,me superaba el sentido de la responsabilidad. Pasé muchísimo estrés porque sabía que estaba cumpliendo mi sueño de una poderosa banda sonora con una gran orquesta”. El músico leyó el guion antes de componer. “Pensé que me dejaba claro el tono musical, pero Bob me explicó su visión, y solo después de asistir a un pase de trabajo entendí claramente lo que quería, con una marcada línea heroica. Las cosas fueron bien, y eso lo confirma el hecho de que hoy hay más gente —si eso es posible— que ama la película que en su estreno en 1985”.
En Regreso al futuro hay una estupenda selección de canciones que ya aparecían desde el guion, como Johnny B. Goode o Mr. Sandman. “Y ellas mostraban el camino, porque a Bob le gusta marcar el tiempo en que se desarrolla la acción con temas de esa época. Huey Lewis supo componer otro par de canciones que bebían de la esencia de los años cincuenta”. Silvestri se lanza a detallar el cuidado con que el equipo técnico recreó una década muy añorada en Estados Unidos. “Pero eso no podía afectar a la partitura, al menos de forma clara. Ideé varias melodías, como la que acompaña a Doc Brown [un delirante y maravilloso Christopher Lloyd], que suena a dibujo animado [Silvestri empieza a tararearla] o como la que recuerda a fuegos artificiales o a una máquina pinball con su ruido extravagante... La música servía para avisar a Marty de lo que venía. Aquella partitura nació de diversas fuentes, y me siento muy orgulloso”.
Alan Silvestri ha añadido 25 minutos a su partitura original
Silvestri ha terminado la banda sonora de la nueva película de Zemeckis, The walk, que describe la hazaña del francés Philippe Petit, el funambulista que en 1974 cruzó de una Torre Gemela a otra caminando por un cable. “Bob no es un director fácil”. Después de 15 películas juntos, vaya confesión. “Déjame explicarte [risas]. Cuando trabajas con él no tienes escapatoria, porque es un artista auténtico y nunca llegarás a su nivel de esfuerzo. Debes darle tu mejor composición. Nunca lo definiría como fácil, pero es maravilloso trabajar con él. Ama sus películas como si fueran sus hijos. Y, para ambos, Regreso al futuro es de los más queridos”.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.