La animación manda
‘Los minions’, ‘Del revés’ y ‘Atrapa la bandera’ lideran una cartelera en la que hay también amplia presencia española
No nos engañemos. El verano de 2015 no será el verano de nuestro descontento, pero casi. Porque todo cinéfilo tiene puestos los ojos en estos meses…, pero el alma le pide contención hasta el 17 de diciembre, cuando llegue el estreno de Star wars: el despertar de la fuerza, la séptima película de la saga galáctica por excelencia. Han Solo / Harrison Ford exclama al final del último tráiler estrenado hasta ahora: “Estamos en casa”, y así es como se sienten los fans: con ganas de disfrutar de territorios y personajes conocidos –clásicos para toda una generación–, que parecen mejor conservados en manos del director actual, J. J. Abrams, que en las de su fundador, George Lucas.
Sin embargo, hasta ese 17 de diciembre queda mucho cine y muchos estrenos. La temporada 2015-2016 arranca entre el final del festival de Venecia y el inicio del de San Sebastián –este año, repleto de películas potentes españolas, al igual que las dos últimas ediciones, José Luis Rebordinos dixit–. Antes hay verano y espectáculo.
Y en las películas que apuestan por pantallas “cuanto más grandes, mejor” están tres títulos del cine de animación, un trío de trabajos que se pegarán por encabezar las taquillas. La primera en entrar en juego es Los minions (3 de julio), un spin off de la saga Gru, mi villano favorito, que nació de la inspiración de un genio español de la animación, Sergio Pablos. Los bichejillos amarillos, perfectos sicarios de Gru, nacidos para servir, pedían a gritos película propia desde su primera aparición. No solo funcionan como juego de espejos infantil, sino que por su cantidad –en la película, aseguran en Internet, salen al menos 899 con diálogo– también valen para cualquier tipo de chiste y jugueteo visual. La saga es francesa; las intenciones –y los resultados–, internacionales. De ahí que se filme con voces originales en inglés: Sandra Bullock da vida, por primera vez en su carrera, a una villana.
La segunda presencia animada entra en el escalafón de obra maestra. Pixar atesora grandes momentos de la historia del cine: los primeros minutos mudos de Wall-E; la historia de amor con la que se inicia Up; la reflexión sobre el talento y su capacidad para ocultarse en sujetos inverosímiles de Ratatouille (junto a la explicación de qué es un crítico y para qué vale). Y qué decir de las tres Toy Story, Buscando a Nemo, Los increíbles o Monstruos S. A. Pues Del revés (17 de julio) entra en ese apartado. Proyectada por primera vez en el pasado festival de Cannes, Del revés cuenta dos historias: la de Riley, una niña de 11 años que se muda con su familia del centro de Estados Unidos a San Francisco, y las de sus emociones (Asco, Alegría –capitana del equipo–, Ira, Tristeza y Miedo), que desde su cerebro deben enderezar el rumbo de los sentimientos, cada vez más angustiados, de Riley. La facilidad con la que plasman en pantalla los animadores y guionista de Pixar, capitaneados en esta ocasión por Pete Docter, complejísimas tesis freudianas, el fascinante aparataje visual con el que ilustran el intrincado funcionamiento del cerebro, la capacidad de narrar en dos planos –el infantil y el adulto– sin que ninguno de sus públicos se sienta defraudado… Del revés debería llegar a enero bien colocada para los Oscar.
La compleja historia de la niña Riley y sus emociones (Asco, Alegría, Ira, Tristeza y Miedo), firmada por Pixar, debería llegar a enero bien colocada para los Oscar
Atrapa la bandera devuelve a Enrique Gato a la cartelera el 28 de agosto. Ya no es aquel director que sorprendió con Tadeo Jones, sino que ahora se le va a pedir, si no igualar, al menos acercarse a la taquilla y la calidad de las aventuras del arqueólogo de segunda. Atrapa la bandera arranca cuando un astronauta, dispuesto a viajar a la Luna, descubre horrorizado que su familia se le ha adelantado y ha emprendido el viaje en el cohete. Todo para recuperar la primera bandera que fue clavada en suelo lunar por Neil Armstrong y Buzz Aldrin el 21 de julio de 1969, y defender el satélite de la colonización de un millonario loco texano. Con Telecinco Cinema a sus espaldas, Atrapa la bandera cuenta con una poderosa maquinaria de promoción como para plantar cara a las anteriores rivales.
En este largo verano, Oliver Assayas, cineasta francés en estado de gracia en sus últimos trabajos (la miniserie Carlos y Después de mayo), estrena mañana mismo Viaje a Sils Maria, con la que Kristen Stewart se convirtió en la primera actriz estadounidense en ganar el César francés. Stewart encarna a la asistente personal de una gran estrella de la interpretación (encarnada por Juliette Binoche). Ambas se encaminan a un festival de cine para rendir homenaje a un genial cineasta (de indudable referencia a Ingmar Bergman), el descubridor de la estrella, cuando se enteran de su fallecimiento. Tras el certamen, deciden pasar unos días en la casa del director. Assayas habla cada vez con más verdad y limpieza del alma humana, mientras mantiene su pulso visual y exprime a las actrices.
En los balcanes
Otro reputado autor europeo, el español Fernando León, estrena película, Un día perfecto, su primera incursión en el inglés, porque ese es el idioma en el que se manejan los cooperantes internacionales. Un día perfecto se desarrolla en los Balcanes en 1995, cuando un cadáver amenaza con contaminar en 24 horas un pozo con agua potable, fundamental para la supervivencia de una aldea. Benicio del Toro y Tim Robbins son parte de los trabajadores de ayuda internacional que quieren resolver un problema a priori sencillo de subsanar. Pero tras una guerra y con la tensión a flor de piel, no hay nada fácil.
Este verano, por supuesto, habrá megaexplosiones (Terminator: génesis; Misión: Imposible 5. Nación secreta; Ant-man; Pixels; Operación U.N.C.L.E.), pero también será el momento en que dos directores españoles pasen su particular reválida: por un lado, Javier Ruiz Caldera –portentoso en su ritmo, en su capacidad de plasmar gags en la pantalla– estrena Anacleto: agente secreto (4 de septiembre). Ha llegado su momento tras calentar al público con Promoción fantasma y Tres bodas de más. Por otro, Julio Medem, que no dirige un largo desde Habitación en Roma, estrena ma ma (11 de septiembre), un drama protagonizado y producido por Penélope Cruz: palabras mayores.
El infierno de los hombres
Con The Act of Killing, Joshua Oppenheimer se convirtió en la voz de los sin voz, de las víctimas del genocidio indonesio que masacró ese país entre 1965 y 1967. El documental fue seleccionado al Oscar, no lo ganó, pero dejó una huella profunda entre quienes lo vieron. El cineasta texano no ha podido volver a Indonesia, donde es hoy persona non grata. Sin embargo, en los 10 años previos había rodado tanto material que ha podido montar otro documental tan contundente como el anterior: La mirada del silencio (10 de julio), otro bofetón a la conciencia de Indonesia. En la primera película retrataba a los gánsteres que perpetraron las matanzas; ahora confronta a los asesinos con los familiares de los ejecutados gracias a la bonhomía de Adi Runkun, un óptico –nacido después de las matanzas– cuyo hermano fue asesinado en aquel genocidio. Con su estilo poético –impresionan sus planos de la orilla del río Serpiente, donde el hermano de Adi fue ajusticiado junto a miles de personas–, con su incisiva investigación con la que llega hasta los verdugos, Oppenheimer logra otra heladora inmersión en el infierno.
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.