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crítica de 'cuerpos especiales'

La ‘buddy movie’ cambia de género

El director proporciona un electroshock a los lugares comunes de un reiterado modelo narrativo por la vía de su transexualización

Melissa McCarthy y Sandra Bullock, alocadas en 'Cuerpos especiales'.
Melissa McCarthy y Sandra Bullock, alocadas en 'Cuerpos especiales'.

En el seno de La boda de mi mejor amiga (2011), la película que demostró que el discurso sobre la inmadurez del modelo Apatow se podía aplicar con igual eficacia a lo femenino, la comicidad avasalladora de Melissa McCarthy mantenía un constante pulso con la sutileza posscrewball de Kristen Wiig. Paul Feig, director de ese trabajo, reincide en Cuerpos especiales en la estrategia de proporcionar un electroshock a los lugares comunes de un reiterado modelo narrativo por la vía de su simbólica transexualización: la película es, esencialmente, una buddy movie donde las mujeres ocupan el lugar tradicionalmente reservado a los hombres. Y, aquí, Melissa McCarthy ocupa hasta tal punto el centro del plano –y del discurso- que Sandra Bullock se ve obligada a invertir no poca energía en el esfuerzo de que su función de straight woman (o payasa seria) no sea completamente devorada por ese desbocado animal cómico.

Cuerpos especiales es una comedia tan ambiciosa como desmandada en sus contornos: no le hubiese venido mal un metraje más ligero, pero Feig y su guionista Kattie Dippold parecen tener claro que su esquinado sentido del espectáculo no está en el mecánico engarzado de tópicos policiales reducidos a sus puros huesos, sino en la tensión que generan el desfase y las fricciones entre los cuerpos, sin duda especiales (y contrastados), de su pareja de actrices. Melissa McCarthy parece, a ratos, la reencarnación femenina de John Belushi –todo fuego y metralla obscena-, mientras que Sandra Bullock pasa de un envaramiento exigido por el personaje a una suerte de gestualidad desmañada, que revela insólitas potencialidades expresivas en quien fuera el icono de tanta previsible comedia romántica. Feig ha hecho una película excesiva e imperfecta, pero en ella se palpa la saturación de mensajes que palpita bajo la esencia de toda pareja cómica: la rivalidad, la seducción, la camaradería, la mutua identificación… Todo ello en forma de pulso entre dos registros cómicos en apariencia irreconciliables. No es una comedia al uso: Cuerpos especiales no alcanza la perfección, pero deja el testimonio de un combate interpretativo valioso y cargado de matices.

CUERPOS ESPECIALES

Dirección: Paul Feig.

Intérpretes: Melissa McCarthy, Sandra Bullock, Demian Bichir, Michael Rapaprt, Michael McDonald, Marlon Wayans, Jane Curtin.

Género: comedia. Estados Unidos, 2013.

Duración: 117 minutos.

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