El Centro Niemeyer pide amparo al fiscal ante "la continua agresión del Principado"

La Fundación Niemeyer, responsable hasta el próximo 15 de diciembre de la gestión del centro cultural de Avilés, ha presentado ante el fiscal del Tribunal Superior de Justicia de Asturias un escrito de denuncia contra el Principado, gobernado por Foro Asturias, partido de Francisco Álvarez-Cascos, según un comunicado de la Fundación. José Luis Rebollo, secretario de la institución, solicita "la intervención y el amparo del Fiscal sobre las actuaciones de miembros del gobierno" que considera "realizan actividades en público a fin de desprestigiar a la Fundación para lograr el objetivo de controlarla".

"Hemos recibido más de 20 notificaciones por parte de distintos organismos de la Administración desde que comenzara este conflicto", explican desde la Fundación. "Hoy mismo hemos comparecido ante el ente tributario porque nos acusan de no haber pagado el impuesto de actividades económicas cuando estamos exentos de hacerlo. Ya no sabemos qué hacer y la única manera que tenemos de defendernos es ante los tribunales", apuntan. El secretario solicita al Fiscal una investigación "a las personas que han gestionado la Fundación, aprobado o auditado sus cuentas", ya que considera que ello implicará "un estudio independiente e imparcial", contrario, según su opinión, al que ha realizado hasta el momento el Gobierno del Principado de Asturias. "Han aireado en los medios informes y cuentas lo que supone un delito de revelación de secreto judicial", apuntan desde el centro cultural.

El Principado, según el comunicado de la Fundación Niemeyer, ha solicitado hoy la devolución de las subvenciones percibidas en su integridad al considerar que "ningún gasto está justificado por su actividad". Francisco Álvarez-Cascos acaba de valorar en la cadena Cope de Asturias que "este tipo de actuaciones son huidas hacia delante de quienes pretenden la opacidad. El problema que hay en el Patronato es que nadie conoce, fuera de sus miembros, lo que está detrás de la gestión de los recursos públicos, casi el 90%, y me temo que esta iniciativa no sea más que una maniobra más de distracción".

Este reclamo no hace más que ahondar en las acusaciones de graves irregularidades económicas que desencadenaron esta guerra en septiembre. En aquel momento, la Consejería de Cultura aseguró que la fundación "no disponía de facturas que justifiquen una parte de los gastos contabilizados en sus cuentas anuales".

Esta es la segunda denuncia que el centro interpone, tras la demanda contencioso-administrativa contra el Principado que presentaron en octubre por no aceptar la modificación de sus estatutos. Un cambio que reduce la representación del Ejecutivo en el patronato de cuatro a tres patronos. Además, el Principado perdería la presidencia del organismo.

Otra de las disputas afecta a la cesión de los edificios del centro, que el anterior Gobierno asturiano, presidido por el PSOE, asignó a la Fundación durante 50 años. El nuevo ejecutivo, surgido tras el 20-N y presidido por Francisco Álvarez-Cascos rechaza los términos de ese acuerdo. Por eso, el secretario anuncia además que instará mañana ante el Tribunal Superior de Justicia de Asturias la cesión de los edificios a la Fundación, "cumpliendo con ello con el mandato del Patronato y una vez constatado que no se ha producido ningún acuerdo y que este es ya inviable".

Mientras tanto, el Niemeyer tacha días del calendario ante su inminente cierre el 15 de diciembre. "Seguiremos con nuestra actividad normal hasta el 11, a partir del 12 haremos inventario y desmovilización y el 15 entregaremos las llaves cumpliendo con la ley", concluyen desde el Niemeyer.