El vuelo redentor de Mathias Malzieu

Mathias Malzieu (Montpellier, 1974) asoma por la puerta su perfil de petirrojo y gorjea. El escritor y cantante francés, de pequeña estatura y pelo rojizo, avisa con su cantar que ya está preparado para la siguiente entrevista. Se posa en su asiento y como el pájaro que vuela en su última novela, Metamorfosis en el cielo (Reservoir Books), desgrana, entre la fantasía y la realidad, este "cuento para niños grandes", como lo denomina el autor, que desde el 3 de septiembre está en las librerías españolas.

La tercera incursión literaria de Malzieu, después de los éxitos de La mecánica del corazón y La alargada sombra del amor -solo en España ha alcanzado los 350.000 lectores-, narra cómo el peor acróbata del mundo, Tom Hematoma Cloudman, es capaz de superar la escena de riesgo más importante de su vida, el cáncer. El antídoto para esta mala caída: Endorfina, una oncóloga de día en la planta de un hospital, mujer pájaro de noche en el nido que ha creado en el techo del edificio. Pese a lo fantasioso, el autor consigue hacer un hueco de realidad entre el plumaje rojo de sus criaturas planteando dos cuestiones: "¿Qué estamos dispuestos a hacer por amor y cuánto por salvar la vida?". Y entre medias cuela el tercer interrogante: "¿Acaso el amor no cura?", espeta casi afirmando.

El problema llega cuando el brebaje mágico de la criatura redentora implica abandonar la vida humana para abrazar la animal. Al bueno de Hematoma solo le quedan dos cartas en la mesa: vivir enganchado a un catéter paliativo o volar ligero sin el peso del cáncer. "Esta tensión busca el equilibrio entre la fantasía de liberarse como un pájaro y la humanidad de hacerse responsable de una enfermedad y las consecuencias que conlleva", explica el autor.

"Me encantaría poder escribir por la mañana, subirme al escenario por la tarde y salir volando de vuelta a mi casa por la noche", relata mientras trata en falso de despegar. Malzieu se mueve en varias disciplinas: canta y compone en la banda Dionysos; escribe, y hace cine con Luc Besson, el encargado de llevar su segunda novela, La mecánica del amor, a la animación. Un proyecto que comenzó en 2008 y que está previsto esté terminado en octubre de 2012. "Es una película más cercana al burlesque de Chaplin o Keaton que a las de Pixar", adelanta.

Mathias Malzieu reconoce verse reflejado en el protagonista en su afán de superación, pero de una manera menos épica: "Solo por sentir la capacidad de ensoñación de un niño". Tal vez por eso, cuando se le plantea si ve en esta metamorfosis otra película, vuelve a su estado de petirrojo e interpreta las escenas que pasan por su mente. Aletea como la cabaretera que ve en el papel de Endorfina, "me imagino a Dita Von Tees"; y se agazapa y retuerce en el dolor de un enfermo terminal con cara de Gael García Bernal: "Me encantó su papel en La ciencia del sueño y le veo como Tom". "Todo fantasía", aclara antes de que alguien se sienta aludido. Un capítulo más de Malzieu.