Un viejo anhelo
Zubin Mehta abre el III Festival del Mediterrani con el estreno absoluto de una obra de José María Sánchez-Verdú
Se abrió el festival de esta primavera con una obra del gran repertorio y un estreno absoluto. No es mala combinación. Si se hiciera con más frecuencia, quizás sería menor la fractura existente entre la música actual y un público que tiende a rechazar todo lo nuevo. En esta ocasión, además, ambas obras estuvieron servidas por una gran orquesta y un gran director: la del Palau de les Arts y Zubin Mehta.
Qualia-Jardí Blau fue el nombre del estreno, que, por cierto, se erige en una de las pocas concesiones hecha en este recinto al repertorio contemporáneo. Firmada por el compositor de Algeciras José María Sánchez-Verdú, se inspira en el pensamiento, el entorno y la poesía de Ramon Llull. Pero su mérito mayor fue el de crear una realidad sonora interesante y bella en sí misma. La conexión de la música con la literatura y la filosofía vuelve a estar en el punto de mira de muchos compositores del siglo XXI, como lo ha estado en tantos otros momentos de la historia. Wagner y su Gesamtkunswerk fueron uno de los momentos culminantes de ese viejo anhelo. Anhelo que, a pesar de su enorme potencialidad, no libera a los pentagramas de la necesidad de constituirse en edificio con cimientos propios. Qualia los tiene, sin duda alguna. La obra, estructurada en forma de variaciones sobre un acorde de carácter organístico salpicado por sugerentes trallazos de cuerda y percusión, introduce, con las voces del coro y del barítono, resonancias de melismas medievales. Todo ello, desarrollado con una gran elegancia, se conjugó perfectamente con la investigación de las posibilidades del clarinete, tremendas al contarse con un solista como Joan Enric Lluna. Si algo le sobró a Qualia fue minutaje y, quizás también, todos esos humos y colores que ya estaban presentes en la partitura.
III Festival del Mediterrani
Orquesta y Coro de la Comunidad Valenciana. Director: Zubin Mehta. Solistas: Javier Perianes, Miquel Ramon y Joan Enric Lluna. Obras de Schumann y Sánchez-Verdú. Palau de les Arts. Valencia, 29 de mayo de 2010.
La conexión de la música con la literatura y la filosofía vuelve a estar en el punto de mira de muchos compositores del siglo XXI
Las obras estuvieron servidas por una gran orquesta y un gran director: la del Palau de les Arts y Zubin Mehta
Antes, el Concierto en La menor de Schumann estuvo servido por un Javier Perianes menos convincente que de costumbre. Los nervios gastan a veces malas pasadas: a pesar de su intencionalidad y de su técnica, no pudo evitar lanzarse con un punto de dureza, algún roce en los acordes y demasiada velocidad sobre una obra que, si algo requiere, es un fraseo grácil y relajado. El mismo Perianes, en una reciente entrevista concedida a Scherzo, alababa las ventajas de "tocar con naturalidad". Zubin Mehta intentó ajustar la orquesta al solista con toda la maña posible, en tiempo y en espíritu, pero el maridaje, esta vez, no acabó de funcionar. Una lástima.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.