"Es mi día paraíso"
Alejandro Sanz presenta su último disco y dice que lo compuso pensando en emocionar, no en la industria musical
Las ruedas de prensa de Alejandro Sanz tienen fama de parecerse a las Asambleas del Real Madrid. Si en las reuniones del club blanco nunca faltan los comisarios que llevan camisetas de Superman o que argumentan que los baños están muy lejos, en las presentaciones del cantante madrileño son famosas las fans que le llevan tortillas de patatas o periodistas que simplemente le dan las gracias por vivir.
Lo curioso es que no han sido las seguidoras ni los plumillas los que han puesto esta mañana la nota extraña durante la presentación de su nuevo disco, Paraíso Express. Sino el propio Alejandro Sanz que, ante una audiencia de más de 150 personas y 20 cámaras de televisión, sacó su iPhone blanco y se dispuso a hacer una foto que colgó segundos después en su web. Antes de responder a cualquier pregunta. "Es mi día paraíso y me lo han pedido", dijo antes de hacer la instantánea. "Ya está. Cuando queráis".
Cosas del nuevo marketing musical, que no sólo se conforma con tres días de entrevistas en todos los medios, sino también hace que el propio músico interactúe fluidamente con los internautas. Aun así Alejandro Sanz no se deja avasallar: "Cuando hago los discos no me planteo cómo está la industria musical. Me dedico a emocionar con mis canciones. Ese es mi trabajo", apuntó el cantante.
Es lo que intentara hacer con éste su octavo disco. Diez canciones "más positivas" y alejadas del toque italiano de sus primeros trabajos. "Necesito dejar pasar un tiempo y algo de distancia para explicar de dónde han surgido", dijo. "Lo que sí tengo claro es que sigo mirando y respirando flamenco. Es lo que realmente me ha influido siempre". Paraíso Express se convierte así en un viaje a golpe de pop rock para encontrar los paraísos personales. "No quiero cantar sobre mi vida ni mi paraíso ideal, sino contar actitudes humanas comunes. Y los paraísos que tiene cada uno", dijo. Por eso, antes de publicar el disco pidió a amigos (famosos y no famosos) que les mandasen vídeos a su web donde explicaran qué es para ellos el paraíso.
Hay más cosas que han cambiado en las últimas ruedas de prensa de Sanz. La de esta mañana se celebró junto a un colegio. Muchas de las chicas, quizás más preocupadas por la física o la química, ni se habían enterado que por allí estaba el cantante. Lejos parecen esos primeros tiempos en los que le llamaban Alejandro El Desmallador, por su capacidad de hacer que las fans perdieran el sentido. "Había un poquito de cuento en todo aquello", bromeaba esta mañana el cantante cuando le recordaban el mote.
Los que no fallan son los fans de toda la vida, muchos rondando ahora los 30, que ya han agotado las 8.000 entradas (de 60 a 150 euros) de los ocho conciertos que Sanz dará en el Teatro Compac Madrid entre el 25 de noviembre y el 5 de diciembre. Los que no la hayan conseguido tendrán otra oportunidad en mayo, cuando Sanz comience la gira en escenarios más amplios.
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