Alejandro Sanz triunfa en Madrid con un lleno en Las Ventas
El bailaor Farruquito, invitado en el escenario, abucheado por el público
Habían pasado tres años desde aquel concierto, en pleno verano de 2001, en el que abarrotó el Vicente Calderón, y esta noche Alejandro Sanz ha reconquistado Madrid, con un primer lleno en la plaza de toros de Las Ventas -unas 18.000 personas- acompañado de Malú; el jueves será el segundo. La nota discordante llegó con la presencia del bailaor Farruquito, que se llevó un sonoro abucheo del público.
Después de que el rapero andaluz Junior le precediera en el escenario, Sanz comenzó un concierto en el que ha dado un repaso a su carrera y además ha presentado buena parte de los temas que forman su último trabajo, No es lo mismo, del que ya ha vendido más de un millón de copias.
Vestido con vaqueros, camisa, camiseta y el pelo de punta, el madrileño eligió 12X8, uno de los temas nuevos para calentar motores. Mientras se sucedían las canciones una pantalla de vídeo semicircular ofrecía imágenes con las que el diseñador británico Adam Smith ha creado diferentes ambientes. Antes de cantar el esperado Quisiera ser, el músico grito al público: "Por fin, Madrid, tres años y vuelvo a la ciudad que nací, me crié y me enamoré por primera vez. Vamos a hacer canciones, que no son nada; no pueden parar un tanque, pero sí partir el corazón del guerrero que lo conduce".
Con Cuando nadie me ve llegó el momento del recogimiento y las lucecitas del público, esta vez convertidas en aros dorados que regalaban en la entrada. Tras Hoy llueve, hoy duele, regresó a su etapa juvenil con un clásico de su repertorio, La fuerza del corazón. Después volvió al disco nuevo con un tema muy flamenquito, como a él le gusta, Regálame la silla. Cambio de tercio con el rap de Try to save your song, uno de los temas de su No es lo mismo.
Su esposa y 'Operación triunfo'
Siguió en los teclados para interpretar Lo ves acompañado por su gente, entre los que estaban su mujer, Jaydi Mitchell, y algunos de los chicos de Operación Triunfo como Alex o Bustamante. Tocando el cajón interpretó Sólo se me ocurre amarte, para después invitar a Malú a cantar con él Aprendiz.
Para terminar y de forma apoteósica, cantó Corazón partío, sin embargo, a los bises y a modo de sorpresa invitó a subir al escenario a Farruquito. La sorpresa fue que el público de Madrid no perdona al bailaor andaluz el accidente de tráfico que tuvo y que acabó con la vida de una persona, y le abucheó y pitó hasta que, tras bailar una bulería, se fue del escenario. Farruquito se encuentra en libertad bajo fianza de 140.000 euros por haber atropellado en Sevilla el 30 de septiembre de 2003 con un BMW a Benjamín Olalla, quien murió como consecuencia de las heridas sufridas. El bailaor está imputado por presuntos delitos de homicidio imprudente, omisión del deber de socorro y denuncia falsa.
Un popurrí formado por tres de sus grandes éxitos, Y si fuera ella, Amiga mía y Mi soledad y yo, y No es lo mismo, nombre también de la gira con la que estará de nuevo el jueves en Las Ventas, pusieron fin al recital.
Babelia
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