El Festival de Sitges abre sus puertas con un regreso a sus orígenes
'Fantasmas de Marte' inaugura el certamen, una batalla entre marcianos y humanos según Carpenter
El Festival Internacional de Cine de Sitges abre esta noche su 34 edición con la proyección de la película de John Carpenter Fantasmas de Marte y con la presencia de una de sus protagonistas, la actriz estadounidense Joanna Cassidy, la mítica replicante de Blade Runner. El festival, que cierra el próximo día 13, vuelve a sus orígenes apostando "por el cine de terror y de ciencia ficción".
Cassidy será una de las escasas estrellas estadounidenses que llegará a Sitges después de la oleada de anulaciones que ha seguido al atentado del 11 de septiembre en EE UU. El director del festival, Angel Sala, ha explicado que el Festival piensa suplir la falta de estrellas de Hollywood con la presencia de figuras destacadas del cine francés y oriental.
Precisamente, en recuerdo a las víctimas de los atentados, antes de la exhibición de Fantasmas de Marte, el Festival proyecta esta noche los tres primeros minutos de la película Manhattan de Woody Allen, el mejor homenaje a Nueva York del director más genuinamente neoyorquino.
El Festival también contará con la presencia del director galés Peter Greenaway, de quien Sala ha dicho que "hace un cine transgresor, distinto e innovador, que son las señas de identidad del festival".
El regreso al mejor cine de ficción
Sala ha señalado que el festival proyectará películas de gran calidad y que volverá a sus orígenes apostando "por el cine de terror y de ciencia ficción y por un tipo de cine fantástico muy abierto, para todos los públicos, sin mucha sangre".
El director ha asegurado que "éste es un buen año para hacer esta apuesta porque no siempre la programación de cine fantástico tiene la calidad de esta edición" y ha recordado también que el festival está especializado en el género fantástico, que es el que realmente quiere ver el público que se acerca hasta Sitges.
En la presente edición, el Festival apuesta además por el cine catalán con el debut de la compañía La Fura dels Baus con Fausto 5.0 y del realizador catalán David Pujol con La Biblia Negra.
En cuanto a Carpenter, todo un clásico del género y un asiduo de Sitges, presenta en esta ocasión un filme futurista cuya acción se desarrolla en un Marte colonizado por los habitantes de la Tierra. Una exploración científica despertará de un largo letargo un espíritu marciano que poco a poco se apodera de los cuerpos humanos para desatar su ira y venganza al más puro estilo satánico.
Una estética "excesiva"
Para adornar ese ambiente infernal, una estética a medio camino entre Kiss, Alice Cooper y Marilyn Manson y una música que roza el estruendo, heavy metal puro y duro compuesto por el propio Carpenter que incluso Cassidy ha juzgado "algo excesivo", si bien ha matizado que "este tipo de películas no pide música sinfónica".
Además de Cassidy, destacan en el reparto Ice Cube y Natasha Henstridge, que dan vida a una pareja poco convencional, un convicto y una policía, que acaban siendo aliados ante la presión marciana. En la cinta se pueden encontrar retazos de muchos géneros: el western, el cine policial, las películas de artes marciales, las historias de fantasmas o los excesos de La Matanza de Texas con temas que el propio director ha tratado en su filmografía como el colapso social o la camaradería entre hombres y mujeres, que él mismo cogió prestados de su admirado Howard Hawks.
Para Cassidy, "se trata de una película con atmósfera Carpenter", director de algunas perlas de la serie B del género como La Cosa, Halloween o 1997: Rescate en Nueva York. Los escenarios de Marte se rodaron en una mina de México, donde, como ha confesado la actriz, lo pasaron "muy bien, a pesar de las duras condiciones de grabar en pleno verano, durante la noche y con grandes ráfagas de viento".
Babelia
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