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La economía tecnológica avanza en Madrid, pero carece de personal cualificado

Aunque Madrid es pionera en conectividad e innovación, las empresas no encuentran suficientes trabajadores del sector para crecer

Un trabajador en un centro tecnológico de Móstoles (Madrid).
Un trabajador en un centro tecnológico de Móstoles (Madrid).Jaime Villanueva

Madrid es la región con el mayor productor interno bruto por habitante (más de 33.000 euros), y también la que detiene los mejores datos de desarrollo y penetración de la economía tecnológica, según los informes del sector. Cada año aumenta el porcentaje de compradores por Internet y también es la región mejor conectada con banda ancha del sur de Europa. El Instituto Ceprede califica a la región de "puntera" en capítulos como la innovación empresarial, la administración pública y la conexión en hogares. A pesar de ello, la falta de personal cualificado representar una amenaza, un freno, para el desarrollo de las empresas locales, según alertan expertos como los de la fundación Cotec.

La economía tecnológica representa una revolución en los sistemas productivos, de venta y distribución en los países desarrollados. Cada vez más empresas buscan a sus clientes en la web y desarrollan herramientas más afinadas para captar su interés. El porcentaje de consumidores que adquiere bienes y servicios en Internet ha crecido en Madrid ocho puntos en tres años, rozando ya el 50% de la población. Y las firmas no quieren quedarse atrás.

El INE coloca a Madrid entre las regiones (con Cataluña y Comunitat Valenciana) con mayor intensidad en el uso de tecnologías de la información y la comunicación (TIC) entre las empresas de 10 o más empleados en el primer trimestre de 2018. A la vez, según datos del centro de predicción económica de Ceprede, la región consolida su reinado en ámbitos como la tecnología en el hogar, la administración pública y el número de internautas.

Sin embargo, la revolución tecnológica necesita de profesionales que la lleven adelante. Y eso es un talón de Aquiles para la región. Según los datos de la firma de personal Manpower, Madrid sufre como el resto del país en cuanto a captación y retención del talento. La encuesta de Manpower revela que "un 24% de los directivos españoles declara tener dificultades para encontrar el talento adecuado a sus organizaciones".

Salarios más altos

Un problema que atañe, sobre todo, a las grandes compañías --que suelen ubicarse en Madrid--, que no encuentran suficientes profesionales en ámbitos como el Blockchain, el Gemelo Digital y la Inteligencia Artificial. Todos sectores que, según los estudios, garantizan en Madrid salarios más altos que en el resto de España, pero también un conocimiento técnico difícil de encontrar.

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"Madrid está mostrando el camino en la economía española, pero en competencias [de los trabajadores] la situación es mejorable", sostiene Silvia Leal, experta en innovación de la fundación Cotec. Hasta ahora la Comunidad ha mejorado en cuestiones "estructurales", pero esto "no es suficiente", comenta Leal. En opinión de la experta hace falta mejorar la captación de talentos y la inversión en formación continua por parte de las empresas. "No te preparas para la nueva economía haciendo un curso. Necesitas formación continua y seguimiento de la información, porque este sector va cambiando continuamente y hay que generar interés", mantiene.

El informe Mapa del emprendimiento 2018, elaborado para el foro South Summit, confirma que la mayoría de empresas tecnológicas emergentes se concentran en Madrid y Barcelona, donde nace el 60% de las startup españolas. Y según Ceprede Madrid es segunda en innovación empresarial solo por detrás de las Islas Baleares, que "desde el principio se han dado cuenta de que, por su economía insular, les conviene tener muchas actividades en Internet", explica Juan José Méndez, director de estudios de Ceprede. Aun así, "Madrid es la región más puntera en economía tecnológica", confirma.

"Los agentes económicos y hogares, dentro de su dimensión en cuanto a gasto, se han mantenido con mayor dinamismo", añade Méndez. Una señal positiva que ha permitido "acortar la brecha con los líderes europeos". Aunque para que el sistema tecnológico se fortalezca hace falta que las regiones aseguren un gasto del 2% del PIB en investigación y desarrollo. Este es el porcentaje de desembolso fijado con la UE, pero que ha sido desatendido durante los años duros de la crisis. Y esta es una de las claves, aseguran los expertos, para sostener el crecimiento del sector en el medio y largo plazo.

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