Caracteres de tramontana de los hermanos Dalí

Fueron cuarenta años de silencio. Nada. Durante esta larga y triste travesía, Salvador Dalí y Anna Maria Dalí dejaron de hablarse. Mientras el genio surrealista, cuatro años mayor que ella, cabalgaba sin límites agigantando su leyenda, su hermana observaba, desde la distancia, paciente y apenada, cómo el mundo entero acunaba al pintor catalán más universal.

 Al principio Anna Maria la detestó, después la odió. El rencor que la primera musa de Dalí, su hermana, sintió por Gala, la amada del genio, la acompañó durante toda su vida. Fue uno de los detonantes de la ruptura entre los dos hermanos. Lo dice convencido el director de cine Ventura Pons que conoció al pintor y que, desde hacía tiempo, deseaba explicar en la gran pantalla la tormentosa relación entre ambos, uno de los rincones menos explorados de su vida. El resultado es Miss Dalí, "un repaso a la historia del siglo XX a través de la familia de Dalí", explicaba Pons de la cinta que se estrena este viernes en toda España.

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"Son todos unos atramuntanats", espetaba el director para justificar la personalidad y temperamento de esta familia burguesa de Figueres. Un carácter intenso y repentino como el fuerte viento tan predominante de L'Empordà y Cadaqués, una de las principales inspiraciones del artista y cuya "belleza fascinadora", también enamoró al cineasta. 

El espectador viaja al mundo familiar de Dalí, que encarna con soltura y habilidad Joan Carreras que ha querido "encontrar el alma íntima y contradictoria" del artista. Antes de quebrarse su relación, la adolescencia y juventud de los hermanos Dalí fue plácida y feliz. Su padre, un riguroso notario, interpretado por Josep María Pou, asistía complacido al nacimiento del genio surrealista. Años después, el progenitor también rompería con su hijo, después de que este escribió que escupía sobre el retrato de su madre, fallecida tras sufrir una enfermedad. El padre llegó a cambiar su testamento ocho veces. 

La película también es una postal del magnífico pueblo de casitas blancas del Mediterráneo de Cadaqués. De las calas Jonquet, Portaló, Cala Bona, pero sobre todo de Portlligat, casa del artista. Pons retrata con interés la gran amistad entre Dalí y Lorca que interpreta el actor José Carmona - que se estrena en la gran pantalla- que intenta "hacerlo de carne hueso, que se pueda tocar".

El padre de Dalí cambió su testamento en ocho ocasiones

Como Gala (interpretada por la actriz Rachel Lascar), el poeta granadino atrapa al espectador con su mirada. "Me tenéis en la gloria entre tú y mi hermano", agradece complaciente en una secuencia  Anna Maria a "Federiquito", como le llama Dalí, para agradecer los versos que le dedica Lorca: "Dichosa tú, sirena y pastora. Morena de aceituna y blanca de espuma fría. Hijita de los olivos y sobrina del mar". Los tres fueron durante años un triángulo perfecto.

Pons conoció al pintor, pero no a su hermana, a quién veía pasear y que le infundía "respeto". La veterana Sian Philips es Anna Maria en un largometraje rodado en inglés, catalán, castellano y francés. La joven Eulàlia Ballart encarna a la hermana de Dalí en su juventud  "con su

tozudez" y recuerda que Anna Maria escribió un libro en el que "desmonta" la biografía del artista. También aparece en el largometraje Vicky Peña como una de sus amigas y compañera de confidencias.

En las casi tres horas de película, el director asegura haber intentado explicar la "tragedia griega" en la que se convierte la relación familiar entre ambos hermanos. "Un drama marcado por sus caracteres, sus espíritus libres y por haber vivido intensamente los años más convulsos y apasionantes de un siglo", observa Pons que subraya la pasión y fascinación que 25 años después de su muerte sigue despertando Salvador Dalí.