Fomento pide que los partidos tengan “sentido común” para evitar más daños económicos
La patronal catalana destaca que todos los indicadores han caído después del 1 de octubre
La patronal catalana Fomento del Trabajo Nacional ha calificado la crisis política que vive Cataluña como un "agujero negro" que impide que se vea la vitalidad del tejido empresarial catalán. Fomento ha presentado este martes un estudio sobre la incidencia del escenario político en la actividad empresarial, y ha destacado que la mayor parte de los indicadores económicos en Cataluña han mostrado un impacto negativo a partir del 1 de octubre. El director del área de Economía de la patronal, Salvador Guillermo, ha pedido "sentido común" a los partidos políticos que se presentan a las elecciones del 21 de diciembre, y ha alertado de que si la situación actual continúa, el traslado de las sedes sociales y fiscales podría ir acompañado por una caída de la inversión y por el traslado de oficinas y centros de producción.
"Barcelona ha perdido la imagen y la reputación que tenía pese a no ser capital de Estado, exigimos a los políticos que, como en la carta del restaurante, no miren solo lo que quieren sino lo que cuesta aquello que quieren", ha pedido Guillermo. El estudio de la patronal se centra en destacar los avances económicos que el territorio ha conseguido en los últimos años y que, según Foment, está en riesgo por la situación política. La institución ha destacado que, hasta ahora, el 19% de las personas ocupadas están trabajando en empresas multinacionales, y que Cataluña tiene el 31,5% de las filiales de multinacionales que hay en España.
"Es relevante la presencia de empresas extranjeras en Cataluña, y tenemos que ser muy sensibles para evitar escenarios de inseguridad jurídica que las ahuyente", ha expresado Guillermo. En este sentido, Fomento ha asegurado que es necesario mantener las empresas grandes y medianas en el territorio, ya que son estas las que generan riqueza y empleo. Más allá de los cambios de domicilio social y fiscal, Guillermo ha alertado de que persistir en la vía de la independencia puede llevar a las empresas a considerar el traslado de sus centros de producción, donde está la actividad económica, lo que supondría un impacto negativo mucho mayor que el que ha habido en los últimos meses.
En el estudio se indican al detalle los movimientos de empresas en Cataluña, y se muestra que, desde 2013, esta comunidad ha tenido un saldo negativo anual de cerca entre 200 y 300 empresas, a excepción de 2015, año en el que entraron más compañías de las que se fueron. Esta tendencia de los últimos ejercicios ha favorecido especialmente a la Comunidad de Madrid, aunque la salida de las empresas la protagonizaban las pequeñas compañías. Sin embargo, a partir del 1 de octubre han salido más de 2.700 empresas, y según los cálculos de Fomento, más de mil son medianas o grandes.
Fomento del Trabajo ha mantenido que la economía catalana tiene capacidad para reponerse gracias al peso de la industria "y siempre que se mantenga la serenidad política e institucional que evite ambientes propicios al boicot". Así, Guillermo ha asegurado que el boicot a productos catalanes que se ha constatado "es muy testimonial", además que desde el punto de vista económico es puramente irracional. "Hay que insistir en que el boicot no es ninguna solución", y ha remarcado que en algunos casos hacer boicot afecta a otras zonas porque para producir ciertos bienes se necesitan productos de otras localizaciones.
La patronal también se ha hecho eco de la caída del comercio al por menor en Cataluña, y ha añadido que, en el mes de octubre, las compras con tarjeta de crédito se situaron en Cataluña alrededor del 0,6%, mientras que en España llegaba al 6%.
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