Ribó pide una tasa turística flexible, que no se imponga a todos por igual

Más información

“España debería ser más contundente con los portales de alojamientos”

Venecia, Ámsterdam y Brujas buscan límites al sector turístico para evitar el colapso

Valencia planteará una tasa para apartamentos turísticos

El debate sobre la tasa turística se presume largo y polémico en la Comunidad Valenciana, una autonomía que debe más del 13% de su PIB al negocio del turismo. Desde que las Cortes Valencianas aprobaran el jueves una resolución en la que instan al Gobierno valenciano a regularla, las reacciones no paran de sucederse. Joan Ribó, alcalde de Valencia, se ha manifestado este lunes partidario de una tasa turística flexible, que no se imponga todos por igual.

"Es un tema que tenemos que trabajar por lo que le pido a la Generalitat que cuando la regule, permita a los diferentes municipios que puedan desarrollarla o no en función de sus intereses", ha defendido el regidor en el Centre del Carme, donde ha asistido a la firma del Pacto Valenciano contra la Violencia de Género.

"No es lo mismo Valencia, que Canet d'En Berenguer, Benidorm o Torrevieja. El turismo tampoco es el mismo en cada uno de esos municipios; por tanto, creo que la aplicación debe tener en cuenta las peculiaridades de cada uno", reivindica Ribó, cuyo partido, Compromís, ha apoyado junto a Podemos la instauración de la citada tasa.

Según el regidor, vamos a debatir en Valencia, con la voluntad de que participe todo el sector, y desde posiciones de consenso acerca de la tasa. "Y pongo un ejemplo", ha dicho Ribó: "No es lo mismo un apartamento turístico que un hotel. En un hotel se generan muchos más puestos de trabajo que en un apartamento turístico. Por tanto, tendrá que plantearse diferenciadamente".

Ribó entiende que la recaudación de la tasa debe dedicarse a promoción turística y también a paliar el aumento de gasto público que generan los visitantes. 

Los socialistas, socios en el Gobierno de la Generalitat de Compromís, se abstuvieron en la votación del Parlamento autonómico. De hecho, hay destacados cargos públicos socialistas que no están de acuerdo con imponer una tasa. El secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer, es uno de ellos.

La Federación de Ocio, Turismo, Juego, Actividades Recreativas e Industrias Afines de la Comunidad Valenciana (Fotur) ha advertido de que la implantación de una hipotética tasa turística provocará que los turistas opten por visitar otras ciudades españolas que no la tengan y favorecerá al alojamiento ilegal, "el gran problema" de la Comunidad Valenciana.

Esta organización ha lamentado que Podemos presentara una propuesta para su implantación "sin haberse sentado antes con los representantes del sector y haber consensuado una estrategia a seguir".