El PDeCAT se reivindica tras sacrificar a cuatro consejeros

Primera aparición conjunta de la plana mayor del PDeCAT tras la crisis del gobierno del presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont. El mensaje fue claro: el PDeCAT sigue siendo un partido necesario. “Somos la misma gente que cree que no nos equivocamos votando a Convergència durante años”, afirmó David Bonvehí, coordinador del PDeCAT y diputado de Junts pel Sí. La diferencia es que el PDeCAT, según Bonvehí, es un partido “netamente independentista”.

Bonvehí intervino en una tertulia en la que también participaron la exconsejera Neus Munté, cesada el pasado viernes, y su sustituto al frente de la consejería de la Presidencia, Jordi Turull. Durante la tertulia no se habló ni de esa sustitución ni de ninguna otra. Munté se mostró dialogante y conciliadora, virtudes que Puigdemont elogió el viernes pasado en el acto de toma de posesión de su sustituto. “Nosotros trabajamos también para aquellas personas que creen que la independencia no es la mejor opción para Cataluña, para que puedan votar”, declaró. Munté dejó claro, además, que el de Puigdemont “sigue siendo su Gobierno”.

Más tajante estuvo el nuevo consejero de la presidencia. En relación con la postura sostenida hasta hoy por los comunes, Turull afirmó que en lo que se refiere al referéndum secesionista “o se está con las cloacas del Estado o se está con el 'sí'”. Lo mismo repitió Puigdemont en el discurso de clausura del acto. El presidente instó al Estado a “respetar la democracia” y “no utilizar las cloacas”.

El acto, organizado por la federación de Barcelona del partido, forma parte de una campaña organizada por el PDeCAT para explicar los detalles del referéndum y pedir el voto por el 'sí' en municipios de toda Cataluña. Según recordó la directora de la campaña, Montserrat Candini, cuentan incluso con un 'whatsapp' al que los ciudadanos pueden hacer llegar sus preguntas sobre el 1-O. En total, afirmó Candini, ya llevan 400 consultas resueltas.

Pero, a pesar de sus esfuerzos por darse a conocer entre los votantes de la antigua CDC, el PDeCAT sigue sin levantar cabeza. Según las últimas encuestas, apenas conseguiría un 11 % de los votos. Esquerra Republicana de Cataluña (ERC) se haría con el 29,2%. Además, frente al claro liderazgo de Oriol Junqueras, presidente de ERC y vicepresidente del gobierno de la Generalitat, el PDeCAT carece aún de un candidato en firme a la presidencia de la Generalitat.