Duras críticas del tercer sector a las políticas de austeridad de Mas y Rajoy
Las entidades censuran la caída de recursos cuando hay más necesidades sociales
“No podemos aceptar ni reducciones presupuestarias ni las voces que dicen que el sistema es insostenible. Nuestro país tiene riqueza y recursos suficientes para dotarnos de un sistema de bienestar y protección social más ambicioso y eficiente. Tenemos que evolucionar hacia nuevas formas de crecimiento económico”. Es la contundente crítica a las Administraciones central y autonómica y la apuesta que realizan las entidades del Tercer Sector Social en su manifiesto de clausura del IV Congreso que se ha celebrado durante tres días.
El tercer sector, formado por 6.800 entidades y 102.000 trabajadores que atienden a 2,1 millones de personas, reclama recuperar el nivel de inversión social de los años anteriores a la crisis para “avanzar en la igualdad y los derechos sociales”. El sector reprocha este descenso de recursos en un momento de “incremento de desigualdades”, que se evidencia en datos que hablan por sí mismos. “Los ricos ganan seis veces más que los pobres, cuando en 2005 la diferencia era de 4,5 veces. Tenemos 620.000 parados [en Catluña], de los cuales el 36% no tienen ningún ingreso”, explica el manifiesto.
Joan Tugores, catedrático de Economía de la Universidad de Barcelona, también incidió en esta “paradoja” de cuanto más grandes son las necesidades, menos recursos hay. Tugores calificó el momento actual de un “capitalismo 3.0”, en que se está produciendo un retroceso respecto a la igualdad social y se amplía la brecha entre clases. “En 1929 y en 2007, el momento de las dos mayores crisis, estas coinciden con el punto en que la riqueza se concentra en menos manos”, explicó el catedrático, basándose en cifras del Fondo Monetario Internacional.
Tugores partició en uno de los debates que acogió el Congreso y que trató sobre la sostenibilidad económica del sistema y de las entidades. En este sentido, Tugores defendió que conseguir más recursos para el sector social es posible. “Hay soluciones tan insultantemente obvias que uno se pregunta por qué no se llevan a cabo”, se planteó. Entre estas está la lucha contra la evasión y el fraude fiscal. “La OCDE reveló que España está a la cabeza en fraude fiscal. Si este se rebajara y se llegara al nivel de Francia, no habrían hecho falta los recortes”, terció. Tugores también apostó por implantar una fiscalidad global, como se ha hecho con la Tasa Tobin a las transacciones financieras, que busca luchar contra la especulación, o mejorar los procesos democráticos, para que las propuestas de los partidos de la oposición tengan más peso.
En ese mismo debate, Eliseo Aja, catedrático de Derecho Constitucional de la UB animó a las entidades sociales a familiarizarse con los mecanismos jurídicos para “defender los derechos sociales ante los recortes” de las Administraciones públicas.
Las entidades reclaman que se garanticen los derechos básicos de las personas, como el trabajo, la vivienda, la educación, la salud o la alimentación. “No podemos aceptar que las políticas de austeridad devastadoras cuestionen la universalidad de los servicios públicos”, reivindican. Y exigen una prestación social básica, más becas comedor, vivienda a precios asequibles, la dación en pago o fomentar las políticas de ocupación.
En este Congreso, el tercer sector ha buscado dar a conocer su trabajo y la reivindicación su tarea “a pesar de haber pedido ingresos, disminuido plantillas o que algunas entidades hayan tenido que cerrar”, por los recortes y los impagos de las Administraciones. En el encuentro han participado 150 ponentes, ha contado con debates, presentación de experiencias innovadoras o expositores de 62 entidades. Durante la clausura del acto, la consejera de Bienestar Social, Neus Munté, aseguró que las conclusiones del Congreso son “fuente de ideas”.
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