Un sindicato estudiantil tacha de “enchufismo descarado” el caso Pol Xart

“Enchufismo descarado”. Así ha definido el Sindicat d’Estudiants dels Països Catalans (SEPC) el caso de Pol Xart, un joven de 24 años inexperto que la consejera de Enseñanza, Irene Rigau, nombró asesor en mayo con un sueldo de 47.000 euros brutos anuales. A través de un comunicado, el sindicato estudiantil se ha mostrado “fuertemente indignado” por este nombramiento, que achacan al hecho de que Xart es presidente local de las juventudes de Convergència en Girona y a que su madre, Maria Rosa Terradellas, sea la vicerrectora de Estudiantes de la Universidad de Girona. “¿Puede que esto ha facilitado el nombramiento de este cargo a Pol Xart?”, se pregunta el SEPC.

Dos semanas antes de que Xart asumiera su cargo, su madre fue nombrada vocal del Consejo Superior de Evaluación del Sistema Educativo. Este organismo tiene algunas funciones parecidas a las adjudicadas al joven, como el de análisis de los sistemas educativos de otros países, especialmente a lo que se refiere a sus métodos de evaluación, así como el fomento de intercambio y relaciones con las instituciones y administraciones extranjeras. Fuentes cercanas a este Consejo apuntan que Terradellas forma parte de la “cuerda convergente”, igual que la rectora del campus de Girona, Ana Maria Geli, hasta hace dos meses también vocal del mismo organismo. “Son la colla de CiU y muy próximas a Rigau”, coinciden las mismas fuentes.

Xart es licenciado en Ciencias Políticas por la Universidad Pompeu Fabra y en su currículum oficial solo consta una beca en el Parlament y dos meses de trabajo como como consejero comercial en una compañía de seguros. El joven es desde hace dos meses asesor en materia de políticas educativas comparadas de Rigau. “Hay miles de personas preparadas para ocupar puestos de responsabilidad y desarrollar un buen trabajo, pero en este país de enchufismos muchos puestos están ocupados por personas que solo tienen el mérito de tener el carné de partido”, zanja el sindicato.