Los ecologistas alertan otra vez sobre la situación del Espacio Natural de Doñana
El grupo WWF afirma que no se han reducido las amenazas detectadas por la Unesco
Sin avance significativo. Esta es la conclusión a la que ha llegado la organización ecologista WWF tras evaluar si las Administraciones han acometido las recomendaciones para la conservación de Doñana realizadas en 2011 por la Unesco, la UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza) y el convenio Ramsar de protección de los humedales. De las 18 actuaciones recogidas en el informe que presentaron estos organismos tras visitar la zona, WWF solo considera completada una: la elaboración de planes de protección del espacio natural.
En su evaluación, los ecologistas vuelven a alertar de la amenaza que supone para Doñana actuaciones como la ampliación del dragado del Guadalquivir que pretende acometer el puerto de Sevilla, proyecto que IU, socio del PSOE en la Junta, quiere debatir en el Parlamento; el oleoducto que la refinería Balboa quiere construir entre Huelva y Extremadura; y la presión de la agricultura sobre el acuífero del que vive Doñana. Además, WWF señala que en estos dos años han surgido nuevas amenazas como el proyecto de convertir Doñana en un almacén permanente de gas natural, actuación que ha sido paralizada por la Junta de Andalucía y que cuenta con el visto bueno inicial del Ministerio de Medio Ambiente.
Los ecologistas aseguran que la falta de acción y de coordinación entre las diversas Administraciones es la principal causa de este estancamiento. “Es imprescindible que el Estado y la Junta colaboren estrechamente en Doñana, sin retrasar más planes y actuaciones vitales para la conservación de este espacio”, explica el secretario general de WWF España, Juan Carlos del Olmo.
Ante estos resultados, la organización ha pedido a estas instituciones que estudien la inclusión de Doñana en la lista del Patrimonio de la Humanidad en Peligro de Unesco y que se mantenga este espacio en el registro de Montreux de Humedales en Peligro de Convención Ramsar.
Además de paralizar proyectos como el dragado o el del oleoducto, WWF pide la aprobación del Plan de la Fresa con criterios de sostenibilidad, la gestión de la calidad y la cantidad de los recursos hídricos o la creación de un área marina protegida que incluya un plan de recuperación de los hábitats costeros.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma
Archivado En
- Convenio RAMSAR
- Oleoductos
- Ministerio de Transición Ecológica
- Parque Nacional Doñana
- Unesco
- Parques nacionales
- Ecologistas
- Gas
- Gobierno de España
- Organizaciones medioambientales
- Suministro energía
- Andalucía
- Espacios naturales
- Acuerdos ambientales
- Gobierno
- Protección ambiental
- Ministerios
- Administración Estado
- Organizaciones internacionales
- Energía no renovable
- España
- Relaciones exteriores
- Fuentes energía
- Política
- Administración pública