Griñán: “Me preocupa muchísimo el déficit, pero mucho más el paro”

El presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, ha iniciado el año político con una versión ampliada de su discurso de Navidad. A falta de grandes anuncios y decretos, la rueda de prensa tras el primer Consejo de Gobierno de 2013 se centró este martes casi monográficamente en el llamado Pacto por Andalucía, el gran acuerdo político y social que promueve Griñán para salir de la crisis y sentar las bases para el futuro de la región. Prácticamente el único punto de la intervención que no giró en torno al pacto fue cuando se le preguntó sobre si le preocupa la posible desviación del objetivo de déficit en Andalucía para 2012, situado en el 1,5% del Producto Interior Bruto (PIB) regional. Griñán respondió tajante: “El déficit me preocupa muchísimo, pero el paro me preocupa mucho más”. Griñán sostuvo que “se intentará” alcanzar este objetivo, aunque se da por hecho que va a haber una leve desviación.

El jefe del Ejecutivo anunció que el próximo día 14 iniciará la ronda de contactos para conseguir el pacto por Andalucía con el líder de la oposición, el presidente del PP regional, Juan Ignacio Zoido. Posteriormente se celebrarán reuniones con el resto de partidos, sindicatos, patronal, los sectores cultural, turístico y agroalimentario y otros interlocutores “prestigiados y representativos”, afirmó el presidente. Fuentes de la Junta apuntaron que se estudia la posibilidad de incorporar a esta ronda a representantes de la banca.

La política, entre otras destrezas, es el arte de llevar la iniciativa o, al menos, tratar de que no la lleve el adversario. El martes por la mañana, el PP se adelantó al anunció de Griñán y afirmó que Zoido acudirá a San Telmo con la “mano tendida” para trabajar por Andalucía. Sin embargo, detrás de esta aparente buena voluntad, los populares pusieron las primeras prevenciones al acuerdo, una forma de desactivar en el futuro el proyecto de Griñán sin que parezca que rechazan el espíritu de diálogo

Griñán plantea que el pacto, para el que no se ha fijado una fecha, nazca “de abajo a arriba, no de arriba a abajo”, es decir, que “no sea un pacto parlamentario, sino un acuerdo de la sociedad con los partidos”, que llegará a la Cámara en su fase final. Por el contrario, el PP quiere iniciar el camino en el Hospital de las Cinco Llagas. El portavoz del PP en el Parlamento andaluz, Carlos Rojas, anunció que su formación pedirá la celebración de un pleno extraordinario este mes para abordar el contenido del pacto. En esta sesión, los populares pretenden que Griñán aclare “si está de acuerdo con una reforma de la administración andaluza para reducir la grasa política”, algo que consideran clave para crear empleo.

Rojas dijo que el PP “quiere estar en un gran pacto por Andalucía y por el diálogo”. Pero puso una condición: que sea un pacto “verdadero” y no se limite “a una foto, a fuegos de artificios, a propaganda política o a maniobras de confrontación”. Aunque estas cautelas de los conservadores hacen pensar que el acuerdo con ellos está lejano, Griñán se mostró seguro de que todas las fuerzas políticas se sumarán al pacto porque “se van a buscar los puntos básicos de entendimiento”.

El Pacto por Andalucía, cuyo primer esbozo lo presentó Griñán el pasado julio en el Parlamento, consta de ocho ejes: empleo, inclusión social, juventud, mundo rural, consolidación de la sanidad pública y universal, defensa de la educación pública, cultura y defensa del Estatuto de Autonomía. En un momento en el que el modelo territorial se está agrietando con tensiones bilaterales entre Cataluña y el Estado, Griñán pretende que Andalucía sea referente para repensar toda la estructura institucional de forma que “se garantice la igualdad de todos los ciudadanos vivan donde vivan”.

El Gobierno andaluz pretende incorporar a la mesa de diálogo el calendario legislativo para este mandato, que incluye proyectos como la Ley de Transparencia, la Ley de Participación Social, la regulación del Banco de Tierras o la normativa para la lucha contra el fraude fiscal.