Educación defiende el “trabajo bien hecho” de los estudiantes

“La federación valenciana de estudiantes ha trabajado con esta consejería desde hace 25 años, han demostrado que están muy implicados con la educación y han trabajado muy bien”. Así de contundente y de respetuosa con el movimiento estudiantil se ha mostrado la consejera de Educación, Formación y Empleo, María Catalá. Catala es el primer miembro del Gobierno de Alberto Fabra, que se ha reunido con la cúpula del sindicato de estudiantes valenciano Faavem y su presidente Albert Ordóñez, que fue arrestado y “encerrado en un calabozo durante 30 horas” el jueves pasado, en la segunda jornada de protestas estudiantiles y cargas policiales que se están produciendo en Valencia. Todo se agravó cuando la policía detuvo el miércoles a un alumno menor del instituto público Lluís Vives, durante un corte de tráfico contra el corte de la calefacción y los recortes en el sector público de la Generalitat Valenciana.

Catalá ha evitado referirse directamente a las “cargas policiales”, que se saldado hasta hoy con 43 estudiantes detenidos (ocho de ellos menores de edad). “Formo parte del Gobierno valenciano, pero la competencia en materia de seguridad no es mía. Yo le he dicho a Albert que estaría encantada de hablar con él y que mi competencia es exclusivamente sobre educación”. En ese marco, Catalá le ha trasladado al presidente valenciano Alberto Fabra su “inquietud” por la tensión y el clima que se vive en las calles desde una semana, antes de reunirse con lo estudiantes, “y el presidente, lo ha recibido extraordinariamente bien”.

“Entiendo que los estudiantes pidan siempre y de forma contundente la mejora del sistema educativo valenciano”, ha añadido Catalá, antes de preguntarse en voz alta: “¿Cuál es la diferencia entre ahora y otros años?”. La respuesta de la titular de Educación ha contenido una dosis de autocrítica, al reconocer y “pedir perdón” por “los retrasos en los pagos de los gastos de funcionamiento a los centros educativo”.

En los cortes de luz y de calefacción y los problemas para suministrar el comedor escolar se halla el origen de las protestas semanales que, el instituto Lluís Vives, y otras decenas de centros educativos inauguraron en las puertas de las escuelas a finales de enero, cuando el Gobierno de Fabra aprobó un decreto de ajustes salariales”.

Catalá ha reivindicado los “ajustes salariales temporales” aplicados a los docentes, pero ha insistido en que “en este momento, el último cuatrimestre de 2011 está pagado”, en referencia a los “retrasos” que suscitaron las protestas.

Dimisión y propuestas

Por su parte, Albert ha anunciado que las protestas seguirán hasta que “dimita” la delegada del Gobierno, Paula Sánchez de León, a la que consideran responsable de la “brutal carga policial”. “Pasar 30 horas en un calabozo o llevarme esposado, me parece lamentable”.

Catalá ha optado por llamar a Ordóñez esta mañana y recibir de primera mano el “decálogo” de propuestas que los estudiantes aprobaron la noche del lunes en asamblea. Entre estas medidas, piden “normalizar los pagos a los centros educativos públicos”, paralizar los conciertos educativos y si hace falta devolver el dinero a sistema público y que les devuelvan los 11 consejeros que tenían los estudiantes en el Consejo Escolar Valenciano, que se han visto reducido a dos miembros para defender las reivindicaciones de 140 asociaciones de estudiantes de los institutos públicos.

Albert considera su detención una represalia política “por ser consejero” del Consejo Escolar Valenciano. “Fui detenido por ser miembro del CEV y nadie debería ser perseguido por sus ideas”.