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El verdadero problema de Estados Unidos con China
Para tener un orden global estable hay que garantizar que prosperen los países genuinamente democráticos
Para tener un orden global estable hay que garantizar que prosperen los países genuinamente democráticos
El mundo no necesita que haya más países bajo la influencia china o rusa
La prosperidad común frente ante la inteligencia artificial, como frente a las cadenas de montaje del fordismo, va a depender del poder de negociación de los empleados y de las nuevas tareas que se fomenten
Hay un creciente monopolio en el sector tecnológico debido a que el control de los datos genera barreras de entrada
Un impuesto a la publicidad digital es una de las pocas formas de cambiar un modelo de negocio muy destructivo
Las megacorporaciones usan las nuevas tecnologías de una manera que arruinará nuestro futuro colectivo
Sólo con mejores regulaciones e instituciones más fuertes podremos alcanzar la prosperidad
Estas plataformas están sacudiendo los propios cimientos de la comunicación y de la cohesión social
El régimen chino dice que el confucianismo es incompatible con la democracia. Pero el ejemplo taiwanés desmonta esta idea. Y representa un camino político alternativo
Necesitamos Gobiernos renovados, eficaces y útiles para las crisis que están por venir, advierte el economista Daron Acemoglu, coautor del libro de éxito 'Por qué fracasan los países'.
El Estado hace cumplir la ley, controla la violencia y proporciona servicios. La sociedad controla al Estado. Esta lucha, afirman Daron Acemoglu y James A. Robinson, es vital para un mundo libre