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Mary Beard al desnudo (en el sentido literal)

La historiadora del mundo clásico protagoniza una serie sobre el desnudo que estrena Movistar+

Mary Beard, en una escena de 'El desnudo en el arte'
Mary Beard, en una escena de 'El desnudo en el arte'
Guillermo Altares

La historiadora Mary Beard, profesora de Clásicas de Cambridge que ha logrado convertirse una estrella mediática internacional y, a la vez, mantenerse como una respetada académica y un referente feminista, tiene la costumbre de no evitar, más bien todo lo contrario, ningún tema polémico en sus ensayos, en sus declaraciones públicas, en sus intervenciones en redes sociales o en sus documentales para la BBC. Hasta ahora sus trabajos para televisión se habían centrado en la Antigua Roma, pero esta vez ha decidido tratar un tema que incluso en Occidente en el siglo XXI sigue provocando una mezcla de fascinación, morbo y escándalo: el desnudo.

Mary Beard, el desnudo en el arte se estrena el miércoles en Movistar+, aunque el título original de la BBC, El impacto del desnudo, refleja mejor el espíritu de un documental que pretende provocar a los espectadores, polemizar con ellos y, sobre todo, obligarles a reflexionar. En una entrevista en su casa de Cambridge a principios de marzo, poco antes de la gran reclusión de la pandemia, Beard (Much Wenlock, Inglaterra, 1955) explicaba entre carcajadas hasta qué punto el tema sigue siendo delicado: “Es un documental sobre el desnudo que se titula El impacto del desnudo y, aún así, al emitirse en televisión iba precedido de un cartel que advertía: ’Aparecen desnudos”.

Al igual que en todos sus trabajos, tanto sus sesudos ensayos –El triunfo romano, S.P.Q.R. o Pompeya– como en sus documentales sobre el mundo romanoUn imperio sin límites, Calígula o Julio César (disponibles tanto en Movistar+ como en Filmin)–, Beard mezcla la erudición con el humor, el entretenimiento y la provocación. Su conocimiento del arte clásico es enorme –es coautora del volumen dedicado a Grecia y Roma en la Historia de Oxford del Arte–, pero este documental va mucho más allá, porque no trata solamente de la representación del desnudo en la pintura o en la escultura, sino sobre lo que significa el desnudo y cómo se relacionan las sociedades con él.

Mary Beard juega con una recreación del 'Discóbolo' en una imagen promocional de 'Mary Beard, el desnudo en el arte'
Mary Beard juega con una recreación del 'Discóbolo' en una imagen promocional de 'Mary Beard, el desnudo en el arte'

Como explica la propia Beard, su intención con este documental, que escribe y presenta, es “plantear preguntas incómodas y esenciales sobre quiénes somos”. A lo largo de los dos episodios de casi una hora cada uno, recorre museos y galerías de arte de todo el mundo, pero también un taller de pintura en el que un grupo de mujeres, a las que se suma Beard, tienen en su menú de una despedida de soltera aprender a dibujar a un modelo desnudo. Y las preguntas que pone encima de la mesa van mucho más allá del arte: ¿qué es el género? ¿cómo ha tratado el arte la violencia sexual, mostrándola y ocultándola a la vez? ¿cuándo comenzó a esconderse el desnudo infantil? ¿cómo es posible que se pueda censurar una cuenta en redes sociales por reproducir un cuadro de Gustave Courbet, El origen del mundo, que muestra un sexo femenino en primer plano pese a que se expone en el Museo d’Orsay en París, uno de los más visitados del mundo?

Como siempre, además, muestra aspectos desconocidos de lo que creemos que estamos viendo: tres cuadros de la pintora barroca Artemisia Gentileschi esconden en realidad una denuncia soterrada de la violación, que ella misma sufrió a manos de su maestro en una época en que un abuso así se consideraba casi un derecho masculino, o nos enseña una escultura romana, que alberga el Museo del Louvre, que por un lado muestra a una mujer desnuda, aunque, por el otro, tiene un pene. Algunos historiadores creen que se trataba de una broma de un patricio rico para exhibir en sus fiestas, aunque Beard piensa que hay algo mucho más profundo detrás: la idea, que ya existía en Roma, de que no solo los órganos sexuales marcan el género.

Mirar el cuerpo

“Decidimos hacer la serie sobre el desnudo porque pensamos que es un tema sobre el que todo el mundo tiene una opinión”, explicaba en aquella entrevista para Babelia, realizada en marzo cuando la serie acababa de estrenarse en la BBC. “Podíamos haber tratado los paisajes o los retratos, pero el desnudo es algo que produce discusiones intensas. Queríamos hacer una serie que mostrase una visión controvertida del arte, ante la que tienes que tomar posición. Lo que tiene de interesante el desnudo es que es controvertido desde la Antigüedad, desde el siglo IV antes de Cristo. Y sigue siéndolo. Seguimos debatiendo sobre lo que puedes mostrar en Facebook o en Instagram. Puedes ir a un museo y ver desnudos que si pones en tu cuenta de Instagram te suspenden. Es un buen tema para pensar cómo miramos nuestro cuerpo y cómo cambia la forma en que lo miramos. Qué cuerpos no vemos, por ejemplo, tema que tratamos en el segundo programa. ¿Hasta dónde no llega el desnudo? A la gente mayor, por ejemplo. Es un tema muy interesante para debatir”.

Y precisamente para debatir sobre eso, el desnudo de la gente mayor, Mary Beard lleva hasta sus últimas consecuencias el principio que rige todos sus documentales, pero también el resto su labor intelectual: la empatía. “No quería ser la académica que nunca se pone en el lugar de la gente de la que habla”, explica. La investigadora trata de explicar la complicada relación que todas las sociedades tienen con el cuerpo desnudo y el tabú que representa el desnudo de los cuerpos que no se consideran perfectos, especialmente de las mujeres, en un mundo que tiende a promover un ideal de belleza. Lo logra mostrando una escultura de Rodin pero, sobre todo, posando ella misma desnuda ante una retratista. Y lo hace con una mezcla de humor, cercanía y desparpajo que obliga a reflexionar sobre los cánones de belleza en los que estamos atrapados.

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Sobre la firma

Guillermo Altares
Es redactor jefe de Cultura en EL PAÍS. Ha pasado por las secciones de Internacional, Reportajes e Ideas, viajado como enviado especial a numerosos países –entre ellos Afganistán, Irak y Líbano– y formado parte del equipo de editorialistas. Es autor de ‘Una lección olvidada’, que recibió el premio al mejor ensayo de las librerías de Madrid.

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