Lo mejor y lo peor del MWC 2019, según nuestros enviados especiales
Los periodistas de EL PAÍS y 'Cinco Días' que han cubierto la feria este año resumen lo que más les ha gustado y lo que preferirían no haber visto
Marimar Jiménez
Lo mejor y lo peor: Este año lo mejor y lo peor casi que van de la mano. Destacaría para bien los móviles plegables. Por fin dos fabricantes de primer nivel (Samsung y Huawei) muestran un producto que causa asombro, que crea una nueva categoría de dispositivo. Aunque aún está por ver qué recorrido tendrá. Lo malo, que no dejaran tocarlos ni probarlos. Fue bastante decepcionante tener que conformarse con verlos en una vitrina, como si se tratara del collar de diamantes de Lady Gaga en los Oscars. ¿La razón? Posiblemente que falten cosas por pulir y no quisieran que se vieran las costuras de los equipos, pero sorprende porque en el caso de la firma surcoreana su modelo estará en la calle en un mes. También subrayar como positivo que Satya Nadella, uno de los pesos pesados de la industria tecnológica, aprovechara su visita al MWC para reivindicar los valores éticos de la inteligencia artificial. A ver si se recoge el guante. Y que pese a los esfuerzos de Torras y Colau, este año el procés catalán no ha estado en las conversaciones de los directivos que han asistido a la feria.
Fue bastante decepcionante tener que conformarse con ver los móviles plegables en una vitrina ¿La razón? Posiblemente que falten cosas por pulir y no quisieran que se vieran las 'costuras' de los equipos
Como negativo, la decisión de excluir a Cabify de una de las mesas de debate del 4YFN por “razones políticas”, cuando realmente se iba a hablar de crecimiento de startups. Pero ese hecho no ha restado protagonismo a este salón, paralelo al MWC, que cada aña coge más cuerpo. Esa edición ha sido más internacional que nunca y ha contado con más de 760 expositores. Si Barcelona se ha convertido en un referente global para la industria móvil, también apunta maneras para poder serlo del mundo del emprendimiento. Como decepción también citar que muchos teléfonos 5G anunciados son mucho humo, pues aunque lleguen este año al mercado no podrán explotar sus capacidades extra hasta que no estén las redes comerciales 5G. Vamos, hasta finales de 2020 como pronto.
Santiago Millán
Lo mejor: El peso creciente de los inversores en la feria, con especial relevancia para los planes en Europa. No son solo dispositivos. Las miradas se dirigen también hacia los proyectos empresariales de crecimiento del mundo tecnológico y las telecomunicaciones.
Lo peor: Claramente, que en Barcelona casi siempre hay huelgas en el transporte coincidiendo con el Mobile World Congress (MWC). Las empresas extranjeras no dan crédito a estos problemas, supuestamente sobrevenidos, que siempre afectan a sus planes logísticos en el evento. Y, además, sin Uber.
Ramón Muñoz
Lo mejor: Aunque todo el mundo hable de los móviles 5G de Huawei, Samsung, Xiaomi u Oppo, la verdadera estrella del MWC es el Snapdragon 855, el chip de Qualcomm que equipa a todos ellos,y que es el verdadero corazón del dispositivo.
La verdadera estrella del MWC es el Snapdragon 855, el chip de Qualcomm que equipa a todos los móviles 5G
Lo peor: Los taxistas y el transporte en general. Tras ganar la batalla (no sin episodios violentos) y expulsar de la ciudad a Uber y a Cabify, los taxistas se han convertido en una brigada de combate. El viajero depende de la suerte para recibir un buen servicio o ser tratado como un rehén, al arbitrio del humor del taxista. Muchos vehículos son viejos, huelen a tabaco y sus conductores bordan la grosería. Para colmo, los trabajadores del Metro volvieron a ponerse de huelga, ya un clásico en el MWC pese a los altos índices de contaminación que sufre Barcelona estos días.
Ana Pantaleoni
Lo mejor: La movilidad ... pese a la huelga de metro, se pudo ir y volver bien teniendo en cuenta que hablamos de 100.000 visitantes. La ciudad ya tiene por la mano la organización del congreso. Y pese a que la bronca política volvió a deslucir el inicio de la feria, los asistentes parecían vivir al margen. Otra cosa buena es que en la feria vimos aplicaciones prácticas de tecnologías futuras como operar con 5G o abejas controladas desde una nube. Ahora solo toca esperar al año que viene, que promete, pues por primera vez el Sónar estará involucrado en el Mobile World Congress y prometen un gran espectáculo.
Lo peor: La feria pone al descubierto de nuevo, como ocurre en otros congresos, la precarización laboral. Las azafatas no pueden cobrar un euro menos por ser más bajas y otras exigencias que hemos visto en algunos anuncios denunciados por el sindicato UGT. Eso ha provocado que Inspección de Trabajo de la Generalitat anuncie que investigará el caso. Ahora solo toca esperar que sirva de algo.
PD: Lo peor es también la cara de idiota que se me queda cuando a las 11.30 de la mañana mi móvil ya no tiene batería y me veo sentada en el suelo de la moqueta, limpia eso sí, cargando el móvil en un enchufe junto a una papelera. El tema de las baterías del móvil el Mobile no lo ha solucionado.
Jordi Pérez Colomé
Lo mejor: Sigue siendo una feria clave. El mundo de las telecos, fabricantes y start-ups realmente pasa por Barcelona durante unos días. La organización por ahora resiste el reto, aunque hubo colas largas para registrarse el primer día, para coger un taxi a última hora y algunos bloqueos en la Gran Vía y en los metros en huelga. Y sigue creciendo. En una feria de móviles y telecomunicaciones, hay ya camiones, patinetes y abejas. Según el presidente ejecutivo de Microsoft, Satya Nadella, todas las empresas serán tecnológicas, así que las innovaciones ya no llegarán solo de Silicon Valley, sino de todas partes. Tanta variedad quizá cree spin-offs.
Lo peor: Es inabarcable. Las charlas se solapan con las presentaciones, los stands interesantes pueden estar a 20 minutos de distancia y que la feria paralela 4 Years From Now esté en Plaza España complica los encuentros. Más para un periodista perdido. Los veteranos aún recuerdan cómo el primer Mobile en Barcelona estaba en Plaza de España, con un gran stand de Nokia en una de las esquinas. Su expansión es reflejo del sector.
Jordi Pueyo
Lo mejor: Finalmente ha llegado el móvil plegable. Huawei, Samsung y LG han mostrado en el Mobile teléfonos con dos pantallas, que se doblan y dan paso a unos nuevos terminales a caballo entre un teléfono y una tablet. Las dos primeras marcas lo han hecho en una vitrina. La otra ha dejado que los congresistas lo palparan aunque es el que tiene una apariencia más rígida en la articulación. El stand del proyecto europeo Graphene Flagship deja entrever unas versiones de móviles mucho más maleables gracias al nuevo material. La investigación que se está llevando a cabo en el programa europeo promete dar sus frutos en las ediciones del congreso de la próxima década.
En el MWC sigue pendiente el reto de la igualdad. Las mujeres continúan sin tener apenas presencia en el congreso
Lo peor: Algunas tecnologías que son una promesa desde hace años como el grafeno o la tecnología cuántica evolucionen de forma más lenta a la que desearían los congresistas. De forma similar pasa con el 5G. Este año ha sido un auténtico revulsivo con aplicaciones muy interesantes en ámbitos como la salud o la movilidad. Los prototipos son muy potentes en términos de marketing, pero aún hace falta esperar más para que formen parte del día a día. Otra inquietud: se sigue sufriendo por la continuidad del congreso en Barcelona a partir de 2023.
Isabel Rubio
Lo mejor. El Xperia Z1, el buque insignia de Sony, cuenta con una nueva función de grabación muy prometedora. Se llama Cinema Pro y ha sido desarrollada por CineAlta —el equipo de cámaras profesionales de Sony—.La marca nipona ha apostado además por un formato de sus pantallas más alargado para aprovechar así la tendencia de los usuarios de optar por sus smartphones para visualizar vídeos y películas. También destacan los avances de la realidad extendida en diferentes sectores. Entusiasma la posibilidad de interactuar con hologramas que ofrecen las HoloLens de Microsoft, aunque aún tienen sus limitaciones.
Lo peor. Móviles plegables, sí. Pero solo expuestos dentro de vitrinas y a precios desorbitados. Aún falta por ver si las compañías consiguen hacer estos smartphones con pantallas flexibles asequibles para el consumidor final. Los móviles que pueden ser controlados con gestos como el LG G8 ThinQ aún tienen sus funciones muy limitadas y también está por delante el desafío de fabricar baterías con más capacidad sin que los teléfonos parezcan unos ladrillos. En el MWC además sigue pendiente el reto de la igualdad. Las mujeres continúan sin tener apenas presencia en el congreso.
Josep Catà
Lo mejor. Si el agobio de los congresistas y las novedades te hacen difícil pisar el Mobile, siempre está el salón de los emprendedores, el 4YFN, que también puede darte una buena aproximación a los principales temas tecnológicos del año. No solo por las charlas y conferencias, sino también por las centenares de startup que llevan a lo concreto y a la vida cotidiana conceptos abstractos como la Realidad Virtual, la Inteligencia Artificial o el Internet de las Cosas. Como el caso de Pal Robotics, que ha creado un robot para ayudar a las personas mayores a ser más autónomas. O una startup japonesa que te entrena el oído para la música.
Lo peor. Cada vez hay más empresas emergentes que están presentes en el 4YFN. Aunque es una buena noticia, el visitante se pierde, y le es imposible saber cuáles le pueden interesar más, ya que el recinto de plaza España se convierte en una gran explanada con multitud de pequeños stands, y todos parecen el mismo. El 4YFN ha cerrado esta edición con 23.000 asistentes y 760 empresas.
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