_
_
_
_

Fotografías desde los ojos de un dron

Dronestagram es una red social con imágenes y vídeos capturados por aviones no tripulados

Isabel Valdés
Segundo premio del concurso de Donestagram. Manila (Filipinas).
Segundo premio del concurso de Donestagram. Manila (Filipinas).Jericsaniel

Pies sobre la arena de la playa, gatitos desde todas las perspectivas posibles y platos de gastronomía de medio mundo... y ahora, imágenes captadas desde el cielo. Dronestagram es la primera red social para fotografías y vídeos hechos con aviones no tripulados, "y quizás otro tipo de imágenes aéreas", explica su creador, el francés Eric Dupin. La plataforma acaba de cumplir su primer año de vida, —nació el 25 de julio de 2013— y quiere convertirse en la web de referencia para este tipo de contenidos.

Además de publicar y permitir que los usuarios intercambien fotos, el site también anima la participación de los usuarios con la organización de concursos. El primero arrancó el pasado 15 de mayo y contó con la colaboración de National Geographic como jurado. Dupin explica como surgió esa alianza: "Les ofrecimos que fueran socios y jurado y aceptaron. Les gustó la idea. Hay que tener que en cuenta que son especialistas en fotografía".

En cualquier punto del globo terráqueo hay aficionados a pilotar drones, algunos con verdadera pasión. Eso fue lo que llevó al creador de Dronestagram a crear la red social. "Vuelo drones por pasión personal y también hago fotos y vídeos". Un día, mientras se hacía una foto de grupo junto a varios participantes de una conferencia en San Petersburgo (Rusia), un dron se acercó a ellos. Y los inmortalizó. El francés explica que las fotos del aparato eran "bastante más interesantes" que las del fotógrafo que las estaba tomando. Fue entonces cuando se preguntó dónde se podían ver y si había algún lugar en la web que las agrupara: "Como no existía nada así, tuve la idea de crear Dronestagram".

Playa de Gueirua, en Cudillero (Asturias). / RAPOSU

El portal ya tiene aproximadamente 10.000 usuarios, que era el reto que se habían marcado para el primer año; y más de 15.000 fotos y vídeos publicados en 10 categorías diferentes. "El siguiente paso son los 100.000, pero seguramente eso lleve más de un año", explica Dupin. Los drones son un hobby relativamente nuevo, poco extendido y caro: pueden costar una media de 350 euros. 

En algunos países aún no existe un marco legal que lo regule, como en Estados Unidos, donde las autoridades no han abierto el espacio aéreo a los drones domésticos para su explotación comercial. En España, el Consejo de Ministros aprobó el pasado 5 de julio un decreto temporal que permite que estas pequeñas aeronaves (solo las inferiores a los 150 kilos) surquen, mientras se estudia la norma definitiva, el cielo. El Gobierno estableció los requisitos para los aparatos y también para los pilotos y las empresas que los usan.

Fue suficiente para mover, o al menos quitar trabas, al mercado. Jim Williams, de la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos, estima que 90.000 millones de dólares es la cifra que podría generar el mercado de los drones domésticos durante los próximos diez años. Un negocio que también se ve encorsetado por las dudas éticas sobre privacidad.

Dronestagram, por el momento, no ha tenido problemas de este tipo. Pero no baja la guardia. Dupin pone como ejemplo las condiciones para subir fotografías a la plataforma: "Estamos atentos. Nuestras condiciones de publicación indican claramente que las fotos y los vídeos deben ser tomados en condiciones que no pongan a las personas en peligro y deben cumplir con las leyes del lugar donde se toman". Hawai, Ucrania, Isla Canguro, o Zhuhai. Instantáneas que solo pueden agarrarse desde el aire.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Isabel Valdés
Corresponsal de género de EL PAÍS, antes pasó por Sanidad en Madrid, donde cubrió la pandemia. Está especializada en feminismo y violencia sexual y escribió 'Violadas o muertas', sobre el caso de La Manada y el movimiento feminista. Es licenciada en Periodismo por la Complutense y Máster de Periodismo UAM-EL PAÍS. Su segundo apellido es Aragonés.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_