Anatomía de un ‘selfie’

¿Quién publica más 'selfies'? ¿Cuál es el perfil del usuario más activo? ¿Hay más mujeres que se autorretratan con sus teléfonos o son mayoría los hombres? ¿Qué emociones delatan sus imágenes? Un equipo de analistas estadounidenses, coordinados por el experto en cultura digital Lev Manovich, han intentado resolver estas y otras preguntas. A pesar de que este fenómeno logró convertir el término selfie en la palabra del año en 2013, y de que estas fotos, retrato a retrato, parecen haber invadido las redes sociales, carecíamos hasta ahora de un estudio que nos permitiera adentrarnos en su significado.

Selfiecity es la respuesta. Este proyecto comisionado por la Universidad de la Ciudad de Nueva York, ha diseccionado una colección de 3.200 fotografías tomadas en cinco ciudades del mundo a lo largo de una misma semana, 640 por cada una de ellas: Moscú, Nueva York, Bangkok, Berlín y Sao Paulo. El equipo de Manovich rastreó en realidad un total de 140.000, de las que seleccionaron finalmente aquellas que sí podían considerar como un selfie y que hubieran sido publicadas en la plataforma Instagram.

El estudio revela que, pese a lo extendida que pueda parecer esta tendencia, apenas entre el 3% y el 5% de las imágenes analizadas eran realmente selfies. La mayoría de ellas son publicadas por mujeres: el 55% en Bangkok, el 59% en Berlín, el 61% en Nueva York y el 65% en Sao Paulo. La diferencia es aún mayor en Moscú, donde el 82% de estos autorretratos son realizados por usuarias.

El equipo de Selfiecity, ha publicado todas las imágenes en la página del proyecto para que los lectores, a través de excelentes inforgrafías interactivas, hagan sus propias comparaciones y descubran, antes de consultar las estadísticas, que los usuarios de Bangkok y Sao Paulo sonríen más que los de Nueva York o Moscú; o que en Berlín la mayoría de ellos posa con la boca cerrada y que parecen los más mayores del grupo.

Los datos confirman después que Berlín, con 26,3 años de media y Nueva York, con 26,7, son las ciudades con la media de edad más alta entre los creadores de selfies. El equipo de Manovich ha trabajado con los analistas de Gnip.com para rastrear los datos de los usuarios en las redes sociales y confirmar si, como aparentan los autores de los selfies de Bangkok, son los más jóvenes de todos. El estudio revela que así es, con una media de 21 años.

Las imágenes han revelado también que la mayoría de las protagonistas femeninas sonreían al tomar la foto y no estaban “en calma” ni “enfadadas”. Sin embargo, en el caso de los hombres, estos sonreían menos y en algunas ocasiones -una minoría- mostraban enfado o falta de calma. Los investigadores se han fijado también en detalles como la proporción de usuarios que giraba la cabeza en el instante de autorretratarse, cuántos posan con gafas (una minoría) o si miraban hacia arriba (la mayoría en las cinco ciudades) o hacia abajo (especialmente en São Paulo).

Este primer paso en el estudio de los selfies plantea ahora si, por ejemplo, la media de edad del país asiático significa que sólo sus usuarios más jóvenes apuestan por publicar estas imágenes o si la mayoría de los usuarios de smartphones son jóvenes -lo que explicaría la influencia de la tecnología en este fenómeno, por encima de otros factores culturales.