Muere a los 81 años Jack Kilby, inventor del circuito integrado
La unión de transistores en un único componente marca el inicio de la era de la información
Jack Kilby, premio Nobel de Física e inventor de los circuitos integrados que llevaron a la creación de los microprocesadores, murió de cáncer a los 81 años el lunes. Esos dispositivos son considerados el primer paso hacia la sociedad de la información. Sustituyeron a los tubos al vacío y llevaron a la creación de microprocesadores, que en la actualidad forman parte de casi todos los aparatos digitales, desde las televisiones, hasta los hornos microondas, pasando por las radios a transistores y los ordenadores.
El ingeniero estadounidense creó en 1958 el primer circuito integrado, en el que todos los componentes constituían una sola pieza de material semiconductor de tamaño microscópico. Este logro le valió la concesión en el año 2000 del premio Nobel de Física. Tom Engibous, presidente de Texas Instruments (TI) -la empresa para la que trabajó Kilby durante muchos años- ha dicho que el trabajo del físico estadounidense es comparable al de otros científicos que "transformaron al mundo" como Thomas Edison, Henry Ford y los hermanos Wright.
Kilby dijo, tras ser galardonado con el Premio Nobel, que pensaba que su invento "sería importante para la industria electrónica", pero no entendía "cómo iba a impulsar su crecimiento". Este en todo caso llegó pronto y se ha mantenido a lo largo de los años. El año pasado, por ejemplo, los circuitos integrados registraron en 2004 ventas por 179.000 millones de dólares (148.031 millones de euros) en un mercado global de la electrónica de 1,1 billones de dólares (unos 909.629 millones de euros).
El silicio y la Ley de Moore
Pocos meses después de que Kilby anunciara la creación del circuito integrado, el cofundador de Intel Robert N Noyce inventó otra versión diferente de este disposotivo. Siete años más tarde, después de que el ingenio llegase al mercado, otro de los fundadores de esta compañía, Gordon E. Moore, formuló la norma por la que desde entonces se rige la evolución de los sistemas informáticos.
Moore observó que el número de transistores presente en un circuito se duplicaba -por efecto de las mejoras en las técnicas de miniaturización, entre otros motivos- a intervalos regulares, y predijo que este fenómeno se seguiría produciendo en el futuro. Esta afirmación es conocida como la Ley de Moore y es una de las peculiaridades más conocidas de la industra de los procesadores.
Si el cumplimiento de la Ley de Moore ha sido posible, es porque el circuito ideado por Noyce en Intel estaba basado en el silicio, frente al germanio y los cables que utilizaba Kilby. Aún así, su idea de integrar en un único dispositivo transistores y resistencias sigue considerándose revolucionaria, un logro que marca los últimos 50 años.
Más de 60 patentes
Nacido en Kansas (EEUU) en 1923, Kilby heredó el interés por la electrónica de su padre, quien era dueño de una pequeña empresa de aparatos eléctricos, y en 1970 recibió la Medalla Nacional de las Ciencias, en una ceremonia en la Casa Blanca. Según manifestó en su autobiografía, comenzó a interesarse por los tubos al vacío cuando escuchaba música en la radio. Estudió ingeniería eléctrica en las universidades de Illinois y Wisconsin, e inició su carrera en Centralab Division of Globe Union, en Milwaukee, donde desarrolló circuitos de cerámica para productos electrónicos.
Además de la invención clave de los circuitos integrados, durante su carrera en Texas Instruments Kilby trabajó en desarrollos que supusieron el registro de hasta sesenta patentes, e intervino en la creación de dispositivos importantes como la calculadora y la impresora térmica.
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