Decenas de europeos pagan hasta 3.000 euros a las discográficas tras las denuncias por piratería

La Federación Internacional de la Industria Discográfica (IFPI) anunció ayer una nueva oleada de demandas contra internautas que comparten música ilegalmente. En total ya se han iniciado acciones legales por este motivo contra 2.947 personas en EE UU y 230 en Canadá, Italia, Alemania y Dinamarca. Cerca de noventa denunciados en los dos últimos países han pagado o se han comprometido a pagar a las discográficas compensaciones de hasta 3.000 euros cada uno.

El presidente de la IFPI, Jay Berman, afirmaba ayer, durante el anuncio de la presentación de las nuevas denuncias, que el organismo internacional tomará medidas legales próximamente contra 24 internautas daneses.

Además, Berman aprovechó su comparecencia ante la prensa para advertir a otros países de que no se librarán de los abogados de la industria. La asociación que reúne a las discográficas afirma que Reino Unido, Francia, Suecia y Japón -segundo mercado musical del mundo- también están en su punto de mira, pues en estas naciones el intercambio de canciones a través de redes P2P funciona, pero las ventas de discos siguen cayendo.

El palo y la zanahoria

La IFPI cree que su actual estrategia, que define como la de "el palo y la zanahoria", está dando resultados positivos. Por una parte, las discográficas respaldan desde hace un año negocios legales de venta de música a través de Internet, como iTunes, Napster o Connect. Por otra, intenta disuadir a los internautas de utilizar las redes P2P mediante su campaña de acciones legales, que ya alcanza a casi 3.000 personas en EE UU y a más de 200 en Europa.

Berman asegura que la combinación de ambas acciones muestra como resultado signos esperanzadores, pues el número de archivos musicales que pueden descargarse ilegalmente desde las redes de intercambio desciende, según afirma. Además, la IFPI ha detectado una mayor concienciación entre los internautas de que estas conductas son ilegales.

Las victorias de la industria

Con estas armas, la industria considera haber logrado victorias en casos como el de un joven alemán de 23 años que guardaba en el disco duro de su ordenador unos 6.000 ficheros musicales ilegales y que tenía en casa unos 7º disco compactos con más música pirateada. Antes de que se realice el juicio el acusado ha acordado cerrar el litigio pagando 8.000 euros como compensación. Otros 88 ciudadanos daneses han llegado a un acuerdo similar con las discográficas, pero en su caso tendrán que pagar menos, unos 3.000 euros.