Dos de los siete agresores de la violación múltiple de Logroño son inimputables al no tener aún 14 años

La violación grupal el domingo a dos niñas de 12 y 13 años en Logroño la perpetraron siete menores. La investigación deja, de momento, cinco detenidos. Tras declarar durante toda la mañana de este miércoles ante la Fiscalía de Menores, el juez ha ordenado el internamiento en régimen cerrado para dos de los acusados, y ha dictado orden de alejamiento y prohibición de comunicarse con las víctimas para los otros tres. Estos tres menores siguen expedientados, es decir, se practicarán más diligencias de investigación para averiguar su grado de implicación en los hechos denunciados. Otros dos implicados, que aún no han cumplido los 14 años, permanecen bajo la tutela de sus familias, al no poder exigírseles responsabilidad por la edad penal. Cuando se hizo pública la noticia el martes, las autoridades estimaban que el número de agresores era entre 10 y 12.

Los hechos ocurrieron la noche del domingo, en la planta baja de un edificio de la avenida de Navarra, cerca del casco antiguo de la capital riojana. Tras conocerse por Instagram, los agresores quedaron con las dos víctimas en un punto cercano al inmueble. El grupo condujo a las dos niñas hasta el número 16 de la avenida, una vivienda desocupada donde residía hace años el personal encargado de la portería del edificio, y que estos jóvenes utilizaban como lugar de reunión.

Una de las niñas afectadas relató lo sucedido a los agentes de Policía Local de Logroño, con los que se encontraron hora y media después de los hechos. Tres patrullas se desplazaron inmediatamente hasta el lugar, donde identificaron a algunos de los agresores, que todavía se encontraban allí. El caso ha pasado a manos de la Policía Nacional, que prosigue con las pesquisas para esclarecer todos los extremos y mantiene abierta la investigación.

La violación es la última en sumarse a una lista de agresiones múltiples que han generado alarma, agravada por la edad de los atacantes y de las víctimas, que en algunos casos llegan a bajar a los 11 años. La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha relacionado este miércoles el aumento de este tipo de agresiones sexuales, cometidas por menores, con un incremento del número de las denuncias, la visibilización de los casos de la violencia sexual y la mayor confianza en las instituciones. “Hasta ahora existía también una tasa altísima de prevalencia, pero no se denunciaba y [los casos] permanecían invisibilizados porque daba vergüenza o miedo denunciar o porque costaba más identificarlo como lo que era, porque estaba normalizado”, ha asegurado la titular de Igualdad en una entrevista en RNE.

Montero ha reconocido también la existencia de “un problema grande como sociedad”, en alusión a los estudios que muestran que “la edad de acceso a la pornografía es de ocho años”. Por ello, ha incidido en la necesidad de una educación sexual obligatoria en todas las etapas educativas, desde la infancia, que ayude a los menores a hablar del consentimiento, a identificar la violencia y a pedir ayuda a sus referentes. También ha aludido a medidas concretas, previstas en la ley del solo sí es sí, para garantizar “que existe un reproche a los agresores que son menores de edad”, aunque ha reiterado que la solución para por la “educación, prevención y sensibilización en todos los ámbitos de la sociedad”.