_
_
_
_

Los datos de hospitalizados con el coronavirus incluyen hasta un 40% de pacientes ingresados por otras dolencias

La contagiosidad de la variante ómicron y la protección de las vacunas disparan la proporción de admitidos “con el virus” pero no “por el virus”, casos hasta ahora muy poco frecuentes

Oriol Güell
Crisis del coronavirus
Planta reservada para enfermos graves de covid-19 en el hospital Son Espases de Palma de Mallorca.CATI CLADERA ((EPA) EFE)

La ocupación hospitalaria de la sexta ola superó hace dos semanas los registros máximos que dejaron las dos anteriores, según los datos que ofrece cada día el Ministerio de Sanidad con información que le remiten las comunidades. Los más de 17.000 ingresados que hay ahora con el virus superan de largo a los cerca de 10.500 que marcaron los picos de la cuarta y quinta ola. Los responsables de los centros, sin embargo, avisan de que estas comparaciones deben hacerse con cautela. La razón es que la gran capacidad de contagio de la variante ómicron y el hecho de que la mayoría de los vacunados pase la infección de forma muy leve o asintomática ha disparado el porcentaje de pacientes que, pese a estar incluidos en las estadísticas oficiales tras dar positivo en las PCR rutinarias, en realidad están siendo atendidos por otras dolencias.

“Hace unos meses estos enfermos eran muy pocos. Representaban un número pequeño y poco significativo del total de ingresados. Pero recientemente han crecido mucho a consecuencia del gran incremento de la incidencia registrado entre la población general”, explica Virgina Fraile, de la Sociedad Española de Medicina Intensiva, Crítica y Unidades Coronarias, Semicyuc.

EL PAÍS ha preguntado a las comunidades autónomas y a una docena de hospitales y especialistas, y los datos recabados (aunque la mayoría han respondido que no disponen de información precisa) revelan que entre el 25% y el 40% de los pacientes hospitalizados se encuentran en esta situación. Julio Mayol, director médico del Hospital Clínico de Madrid, explica que de los casi 100 pacientes que tienen en la actualidad que han dado positivo al ingresar en el centro, “dos tercios sufren covid y un tercio está siendo atendido por otras causas, aunque el virus pueda estar relacionado”. En el Hospital del Mar de Barcelona, el 60% de los casos están ingresados por covid agudo, mientras que el 40% restante por patologías diferentes. Jesús Rodríguez Baño, jefe de enfermedades infecciosas del Hospital Virgen de la Macarena (Sevilla), sitúa este porcentaje en el 25%. Santiago Moreno, que ocupa el mismo puesto en el Hospital Ramón y Cajal (Madrid), calcula que “aproximadamente un 30% de los casos ingresan con el virus pero no llegan a desarrollar covid”.

España no ofrece datos a nivel nacional que distingan entre los llamados hospitalizados “con el virus” y “por el virus”. La única comunidad que ha avanzado algún dato ha sido Madrid, en boca de su viceconsejero de Sanidad, Antonio Zapatero: “El 40% de los pacientes que ingresan en Madrid con PCR positiva no lo hace por covid”, dijo el pasado martes.

Estos porcentajes son similares a los ofrecidos por los países que sí han distinguido entre ambos tipos de pacientes. La sanidad pública inglesa ha proporcionado datos correspondientes al pasado 4 de enero, cuando de 13.045 pacientes ingresados con el virus, 8.200 tenían como “diagnóstico principal” la covid. Esto supone que en el 37,1% de los enfermos la dolencia más importante era otra. Este porcentaje, además, está creciendo con rapidez, ya que solo 11 días antes, el 24 de diciembre, era del 31,7%.

En Dinamarca, el Statens Serum Institute ha observado la misma tendencia al comparar el perfil de los hospitalizados con el virus entre el 30 de junio de 2020 y el pasado 18 de diciembre, con los que ingresaron entre el 1 y el 18 de diciembre. En el primer grupo, el 82% fue atendido con un diagnóstico de covid, el 3% por otras afecciones respiratorias y el 15% por otras patologías. Este último porcentaje aumentó ocho puntos, hasta el 23%, en el segundo grupo (y esto a pesar de que la variante ómicron no empezó a ser dominante en Europa hasta la segunda mitad del mes).

La misma distorsión que provoca en los datos la contabilización de cualquier positivo como un caso covid, independientemente del motivo de ingreso, ocurre con los ingresados en la UCI y también con los fallecidos, aunque en este último caso no existen datos que permitan estimar el porcentaje de muertes reportadas que en realidad se deben a otras causas, explica un portavoz de Sanidad.

Virginia Fraile detalla cómo, con la actual explosión de casos, ha crecido mucho el número de “pacientes que ingresan con un infarto, ictus, otras infecciones e incluso caídas o accidentes de tráfico” que acaban engrosando los datos oficiales de la pandemia, cuando en realidad “no se tratan de covid ni necesitan suplemento de oxígeno por el virus, aunque sí se les aísla para evitar contagiar a otros pacientes y al personal sanitario”.

Esta especialista añade que en algunos casos resulta más difícil descartar que el virus contribuya al mal estado de un paciente: “En el caso de infarto de miocardio, por ejemplo, la mayoría son asintomáticos y el virus no les causa problemas, pero sabemos que en un pequeño porcentaje el virus sí está relacionado con graves afecciones coronarias”.

Julio Mayol considera que “con el conocimiento incompleto del virus que tenemos, asociar solo a otras patologías los cuadros clínicos y excluir el SARS-CoV-2 es algo que no puede asegurarse siempre salvo en casos muy evidentes, como un accidente o alguien que sabes que se ha contagiado dentro del hospital”. “En los casos que ingresan por urgencias con cuadros que pueden tener varias causas, como dolencias cardíacas, insuficiencias respiratorias o una isquemia mesentérica [problema circulatorio que reduce la llegada de sangre al intestino], no es posible descartar al virus como factor contribuyente o desencadenante”, argumenta.

Jesús Rodríguez Baño considera que lo importante es la coordinación entre los distintos especialistas. “Si la infección no causa síntomas o estos son muy leves, el paciente es tratado por el especialista que le corresponde según el motivo de ingreso. Es lo más común, pero si los síntomas van a más, es importante que lo reevaluemos de forma conjunta con él para ver si es conveniente cambiar el diagnóstico principal y el tratamiento”, afirma.

Sanidad y las comunidades han acordado desde el principio de la pandemia compartir datos que sean comparables y permitan seguir la evolución de la pandemia. Pese a ello, las respuestas ofrecidas por las autonomías no coinciden en todos los casos. Así, mientras algunas como Andalucía, País Vasco, Navarra y Murcia no distinguen entre pacientes ingresados “por el virus” y “con el virus” en los datos que remiten cada día a Sanidad, otras como La Rioja y Extremadura aseguran que solo incluyen en el balance diario entre los hospitalizados a los pacientes “que requieren asistencia por ser covid”.

Con información de Bernat Coll, Mikel Ormazábal, Amaia Otazu, Eva Saiz y Virgina Vadillo.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Oriol Güell
Redactor de temas sanitarios, área a la que ha dedicado la mitad de los más de 20 años que lleva en EL PAÍS. También ha formado parte del equipo de investigación del diario y escribió con Luís Montes el libro ‘El caso Leganés’. Es licenciado en Ciencias Políticas por la Universidad Autónoma de Barcelona y Máster de Periodismo de EL PAÍS.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_