La mitad de las autonomías critican el pacto del Ministerio de Sanidad con Madrid

Las comunidades autónomas han empezado a posicionarse tras el acuerdo alcanzado este martes entre el Ministerio de Sanidad y la Comunidad de Madrid para marcar umbrales de riesgo a partir de los cuales tomar las medidas más restrictivas para contener la epidemia. Los gobiernos de País Vasco, Aragón, Cataluña, Asturias, Navarra, Extremadura, Andalucía y Comunidad Valenciana han mostrado su malestar por el acuerdo. El Ministerio de Sanidad y la Comunidad de Madrid acordaron este martes unos límites para tomar medidas restrictivas en toda España: 500 casos por 100.000 habitantes en 14 días, un 10% de positividad en las pruebas PCR y una ocupación de las UCI por encima del 35% por enfermos de covid, aunque con algunas excepciones. Ese acuerdo debe refrendarse este miércoles por la tarde en el Consejo Interterritorial de Salud.

La consejera de Salud de la Generalitat de Cataluña, Alba Vergés, ha sido la primera en criticar el acuerdo: “Es su manera de disfrazar un pacto con Madrid, que no quieren que se les señale solo a ellos. Están escondiendo su incompetencia”, ha dicho Vergés en declaraciones a RAC1 este martes por la noche y en Catalunya Ràdio este miércoles. La consejera ha recordado que “hace semanas” que el Govern ha pedido que “se actúe sobre Madrid”: “Madrid necesita medidas, reducir la movilidad y rebajar la curva, y no pactos políticos que se convierten en un café para todos. Nosotros siempre actuaremos conociendo la realidad y no con inventos pensados a 600 kilómetros por peleas entre el PP y el PSOE”.

Sobre los umbrales, Vergés ha indicado: “Son cifras muy altas y nosotros habremos actuado mucho antes. Así lo hemos hecho en todas partes. Es evidente que con estos criterios hay que actuar”. Mientras, el vicepresidente catalán, Pere Aragonès, ha expresado en Twitter: “Cataluña y su Gobierno han tomado y tomarán las decisiones que hagan falta para detener la pandemia. No nos enredarán en sus chanchullos. Toda la solidaridad con los madrileños víctimas de la covid-19”.

El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha opinado que la propuesta del Gobierno de aplicar las mismas limitaciones en los municipios de más de 100.000 habitantes con alta incidencia de la covid-19 supone “implantar un estado de alarma enmascarado”. “No es nada grato el juego que estamos viendo”, ha afirmado. Y ha señalado que a lo largo de esta semana el Gobierno vasco habló con el ministro Salvador Illa sobre las decisiones que se podrían adoptar, pero ha indicado que tuvo conocimiento de las mismas “ayer por la noche a través de los medios de comunicación”. De hecho, varias autonomías han criticado que los indicadores se hayan conocido antes de ser discutidos este miércoles en el Consejo Interterritorial de Sanidad.

Mientras, el vicepresidente del Gobierno de Navarra, Javier Remírez ha afirmado que el acuerdo “se circunscribe” a Madrid: “El acuerdo se circunscribe al ámbito de comunicación entre el Gobierno de España y el de la Comunidad de Madrid”. Y ha añadido que Navarra acudirá al consejo interterritorial con ánimo “constructivo”. “Esto no es una batalla ideológica ni política entre gobierno”, ha apuntado. “No verán al Gobierno de Navarra como un elemento de crispación, sino como un agente facilitador”, aunque “diciendo claramente que la realidad de la comunidad foral dista mucho de la realidad de Madrid”, ha añadido.

Baleares, por su parte, cree que las realidades de cada territorio son diferentes y es necesaria una perspectiva global para aplicar restricciones uniformes en todas las comunidades autónomas. Fuentes del Ejecutivo de la socialista Francina Armengol afirman que acuden al Consejo Interterritorial de Salud sin ánimo de confrontación, ya que las medidas pactadas con la presidenta de la Comunidad de Madrid solo afectarían en las islas a la ciudad de Palma en la que, recuerdan, ya se han tomado medidas importantes como el semiconfinamiento de barrios o los cribados de población que han permitido reducir la incidencia de casos a la mitad, informa Lucía Bohórquez. “Creemos que es mejor que nos dejen seguir trabajando en nuestra manera de controlar la situación. Hemos tenido dos olas de la enfermedad y hemos podido frenarlas con nuestra forma de trabajar” insisten estas fuentes. Baleares apuesta por fijar el foco en garantizar una movilidad segura entre los ciudadanos de las distintas regiones y países y por la distribución de los fondos europeos para impulsar proyectos que permitan relanzar la economía, seriamente dañada en la comunidad por el golpe al turismo.

Puig: “Madrid no es el ejemplo”

Por su parte, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha expresado que “Madrid no es el ejemplo de ninguna manera de la gestión de la pandemia”, ha advertido, para afirmar que su “liderazgo “no es lo más pertinente” y repetir en varias ocasiones que “no es el modelo”. No obstante ha apuntado que quieren conocer “en profundidad” la propuesta porque solamente saben lo publicado en los medios de comunicación.

El líder asturiano, Adrián Barbón, lamentó a través de un mensaje en su perfil de Twitter el pacto entre ambas administraciones para endurecer en toda España las medidas en la lucha contra el Covid-19. Además, cargó contra las “excusas” de Isabel Díaz Ayuso para no actuar en la región madrileña porque considera que se pusieron en peligro “la salud” de la ciudadanía.

Desde Extremadura, el consejero de Sanidad y Servicios Sociales de la Junta, José María Vergeles, ha pedido “unidad de acción” entre el Gobierno y las comunidades autónomas a la hora de tomar decisiones para paliar los efectos de la pandemia, y ha pedido criterios igualitarios y parámetros generales para todo el territorio español, así como que se eviten “encontronazos” entre los gobiernos.

En cambio, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha asegurado que el acuerdo sobre las restricciones derivadas del coronavirus entre el Gobierno central y la Comunidad de Madrid es “bueno” para las partes. “Estamos básicamente de acuerdo con lo que han acordado”, ha añadido. En una entrevista en Onda Cero, García-Page ha indicado que, independientemente del “ruido” que hay en España, la gestión cotidiana funciona “infinitamente mejor” de lo que pudiera parecer. “Al final, las direcciones generales de Salud Pública de todas las consejerías y el Ministerio mantenemos una coordinación que funciona”, ha apuntado.

El Gobierno de la Región de Murcia se ha mostrado favorable a fijar unos criterios comunes para toda España para aplicar restricciones en la lucha contra el coronavirus, pero ha destacado que esos criterios deben acordarse entre todos los territorios, y no de manera “bilateral” con una sola comunidad, informa Virginia Vadillo. El presidente autonómico, Fernando López Miras, ha asegurado que será “proactivo” en la búsqueda de esos acuerdo, que deban basarse en criterios científicos que vayan más allá de la población o el porcentaje de ocupación de las unidades de cuidados intensivos. En su opinión, se deben valorar también otros parámetros, como el origen de los focos y su posibilidad de control y ubicación, o el porcentaje de pruebas PCR positivas, cuestiones que pondrá encima de la mesa en la reunión de esta tarde.

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