Celaá asegura que el aprobado será “la regla general” y la repetición “la excepción”

La ministra de Educación, Isabel Celaá, ha asegurado este miércoles que “la promoción será la regla general y la repetición la excepción” y ha anunciado que está trabajando con las autonomías en un “gran acuerdo” que propicie certidumbre a las familias frente al escenario del cierre de escuelas por la pandemia del coronavirus. Celaá ha respondido así a una pregunta de la portavoz de Educación del PP en el Congreso, Sandra Moneo, que le ha planteado la urgencia de abrir los centros educativos cuanto antes. La ministra sigue así la recomendación realizada por el Consejo Escolar del Estado, máximo órgano consultivo del Gobierno en materia educativa, que la semana pasada se decantó por evaluar los contenidos trabajados por los alumnos en casa durante el confinamiento, pero a la vez reducir al mínimo los suspensos para no perjudicar a los estudiantes que no tienen acceso a Internet en sus casas (un 10% de los 8,2 millones de alumnos de enseñanzas no universitarias afectados por el cierre de los centros).

“Estamos trabajando con todas las Administraciones educativas, también con las del PP, y coordinadamente hemos adaptado el horario lectivo o flexibilizado la Formación Profesional... hemos hablado mucho con los consejeros y estamos en línea”, ha dicho la ministra, que ha aclarado que la idea es finalizar este curso apoyándose en el arranque el próximo, “siendo la promoción la regla general y la repetición la excepción que nada tendrá que ver con las causas del coronavirus”.

Este miércoles Celaá se reúne con los consejeros autonómicos para decidir cómo se cierra el curso escolar y una de las incógnitas que está sobre la mesa es qué tipo de evaluación se va a hacer a los alumnos, si el aprobado general decretado por Italia (donde los estudiantes pasarán de curso independientemente de las notas de los primeros trimestres), o por una evaluación más flexible. La gran diferencia entre el aprobado general y la promoción positiva es que en esta segunda sí se evalúa a los alumnos; todos pasan de curso pero no con la misma nota. Esta parece ser la vía por la que se decanta el ministerio, pero necesita el apoyo mayoritario de las autonomías para aprobar una orden ministerial.

Moneo ha urgido a Celaá a “presionar” al ministro de Sanidad, Salvador Illa, para que se tomen las medidas sanitarias necesarias para que los alumnos “vuelvan cuanto antes a las aulas”, ya que “ese mundo idílico donde de la noche a la mañana hemos puesto a más de ocho millones de alumnos delante del ordenador y hemos pretendido que sustituya la relación personal con el profesor, no existe”, ha dicho.

La portavoz del PP ha acusado a la ministra de dar por sentado que “en todos los hogares existen dos y hasta tres dispositivos electrónicos, donde los padres pueden trabajar y donde cada niño tiene un ordenador a su disposición, y eso es no conocer la realidad”. “Tiene que liderar y poner en marcha un plan específico de apoyo, cuantificarlo y dotarlo económicamente”, le ha lanzado en la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados.

Celaá ha tildado la petición de presionar a Sanidad para la reapertura de los centros de “irresponsabilidad” y ha recordado que “no son circunstancias que dependan de Educación”. “En el momento en el que Sanidad informe de que existen las condiciones para poder reabrir las escuelas, lo haremos muy gustosamente”, ha afirmado. Además, ha manifestado que el Gobierno sí está preocupado por la brecha digital, pero ha matizado que el problema de fondo es la brecha social, “y esa no es tan fácil de resolver, no se arregla en 24 horas”.

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