Nueve países de Latinoamérica imponen restricciones a los viajeros provenientes de focos de la epidemia del coronavirus
Argentina, Colombia, Venezuela o Chile exigen una cuarentena preventiva o suspenden los vuelos que lleguen a sus territorios desde lugares donde el virus se ha propagado de manera masiva
El nerviosismo por la propagación del coronavirus ahonda su huella en América Latina. Este jueves, Venezuela anunció la suspensión por un mes de todos los vuelos provenientes de Europa y Colombia. Argentina también ha anunciado que suspenderá por un mes los arribos desde países que sean foco de la pandemia. Las medidas se asemejan a las tomadas por Bolivia, también este jueves, y Colombia y Perú, que el miércoles decidieron imponer una cuarentena obligatoria de 14 días a cualquier viajero que llegue a sus respectivos territorios desde otro país que sea un foco de infección. La decisión, que ya había sido tomada por otros países de la región como Chile, Guatemala y El Salvador, se enfoca principalmente en Europa, pues son países como España, Italia y Francia desde los que surgieron la gran mayoría de los contagios confirmados en Latinoamérica. China, epicentro del virus, Estados Unidos, Corea del Sur, Japón e Irán también forman parte de esta lista negra.
Venezuela ha suspendido la llegada de vuelos procedentes de Europa, Colombia, Irán, Japón, Corea del Sur y Panamá, donde ya se registró un muerto entre 11 casos confirmados. La medida estará vigente por 30 días, aunque el Gobierno chavista no ha aclarado cuando entrará en vigor. El presidente, Nicolás Maduro, que hizo el anuncio este jueves, también ha vedado las concentraciones públicas. “Se prohibirán las manifestaciones y actividades públicas masivas, museos, conciertos, marchas, aglomeraciones y todas las posibilidades de que se cree el cultivo para la multiplicación de esta pandemia que está abatiendo a la humanidad”, ha dicho Maduro, que también ha admitido que no descarta el cierre completo sus fronteras con Colombia y Brasil. A diferencia del resto de los países que tomaron esta decisión, Venezuela no ha prohibido el arribo de vuelos desde China. En cambio, Maduro ha afirmado que solicitó al Gobierno chino “el envío de científicos” que han atendido la situación en el país, primer foco de la epidemia.
El Ministerio de Salud venezolano aún no ha confirmado ni un caso, aunque sí ha reportado treinta sospechosos. Maduro declaró el estado de emergencia en el país por la pandemia. Sin embargo, el país atraviesa una severa crisis humanitaria desde 2016, que los epidemiólogos advierten que es un factor de vulnerabilidad preocupante ante la expansión del coronavirus, pues la mayor parte de los centros de salud, incluidos los designados como centinela para la pandemia, tienen severas fallas de suministro de agua y desabastecimiento de insumos médicos básicos. "Estamos preparados para enfrentar estas dificultadas, porque nos hemos entrenado con la guerra económica”, ha dicho Maduro.
Argentina ha elevado su número de contagiados a 21. El miércoles, ante la declaración de pandemia global que hizo la Organización Mundial de la Salud, el presidente Alberto Fernández anunció que preparaba un decreto para declarar la obligatoriedad de las cuarentenas, bajo amenaza de algún tipo de sanción penal. Este jueves, decretó las restricciones de viaje en dos términos: primero, suspendió los visados para ciudadanos de China, Irán y Corea del Sur. Después, decidió suspender la llegada de vuelos desde Europa, Estados Unidos, Corea del Sur, Japón, China e Irán. Estas medidas también conllevan el “aislamiento obligatorio” por 14 días para las personas que estén bajo sospecha de estar infectados por el COVID-19. El ministerio de Turismo y Deportes argentino ha suspendido la presencia de público en todos los eventos deportivos masivos, además de decretar la suspensión de otros espectáculos, como el festival Lollapallooza, que congrega a más de 300.000 personas y 100 artistas durante tres días en la ciudad de Buenos Aires. En Jujuy, en el noroeste del país, no hay clases por 15 días, una medida que evalúan aprobar otras provincias.
El presidente de Colombia, Iván Duque, también ha anunciado la emergencia sanitaria. La decisión, tomada este jueves, permite al Gobierno colombiano cancelar todos los eventos que reúnan a más de 500 personas, suspender el desembarco de cruceros y el aislamiento preventivo de personas extranjeras en hoteles. Duque ya había anunciado, el miércoles por la madrugada, la cuarentena obligatoria a viajeros que lleguen al país desde España, Italia, Francia y China. En el país hay nueve infectados confirmados entre Bogotá, Medellín y Cartagena, tres de las ciudades más pobladas. Los pasajeros que arriben a Colombia deberán autoaislarse 14 días en sus sitios de destino, ya sean viviendas u hoteles. “El aislamiento preventivo se adopta para proteger la salud colectiva”, dijo Duque. Su ministro de Salud, Fernando Ruiz, fue más tajante: “Si no pueden costear el aislamiento, las autoridades sanitarias recomiendan no visitar Colombia”. La semana pasada, tras una decisión del Ejecutivo, el Banco Interamericano de Desarrollo decidió aplazar hasta septiembre su asamblea anual, originalmente programada del 18 al 22 de marzo en Barranquilla, la principal ciudad colombiana sobre el Caribe.
Perú tomó las mismas medidas el miércoles por la mañana. Con 15 contagios confirmados, el presidente, Martín Vizcarra, anunció el “aislamiento preventivo domiciliario” por 14 días para todas las personas que lleguen a Perú desde Italia, España, Francia y China. En un decreto de emergencia, el Gobierno peruano ha emitido una declaratoria de emergencia sanitaria por los próximos 90 días. Entre las medidas tomadas destaca la suspensión de todas las actividades académicas y la prohibición de realizar eventos con más de 300 personas hasta fines. Para prevenir a los ciudadanos, la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, el instituto público más importante del país, ha difundido un vídeo informativo en quechua, la lengua indígena predominante de Perú.
Chile tomó medidas el martes, cuando el Gobierno de Sebastián Piñera decidió calificar como “viajeros de alto riesgo” a quienes lleguen de España e Italia, imponiéndoles también una cuarentena de 14 días. El Gobierno chileno ya había determinado, desde el pasado 6 de marzo, que los pasajeros que lleguen tanto por aire, mar o tierra, firmen una declaración jurada donde deben informar de los países que visitaron en los últimos 30 días –con mención especial a China–, si tuvieron contacto con personas enfermas, si han padecido alguno de los síntomas asociados con la enfermedad y su dirección de alojamiento durante su estadía en territorio chileno. Con 23 casos confirmados, todos importados y con mayor presencia en la capital, aún no se han restringido los eventos masivos. A fines de marzo, Chile tiene previsto acoger su propia edición del Lollapalooza.
La decisión de controlar el paso de viajeros comenzó en El Salvador, donde el Gobierno de Nayib Bukele prohibió desde el 22 de enero la entrada de viajeros procedentes de China e Irán —el cuarto país con más casos de coronavirus. La restricción fue después ampliada para quienes llegaran de Corea del Sur e Italia. El Gobierno salvadoreño escaló este miércoles en su intención de frenar la epidemia antes de que ingrese en el país y declaró una cuarentena nacional por 21 días. Durante esas tres semanas se prohibirá la entrada de personas extrajeras a El Salvador y todas las instituciones educativas estarán cerradas. Guatemala también siguió este ejemplo. A pesar de no tener casos confirmados, el Gobierno guatemalteco prohibirá la entrada de los ciudadanos europeos desde este jueves y confinará en una cuarentena obligatoria de dos semanas a cualquiera de sus ciudadanos que regresen de Europa.
En Bolivia, las autoridades sanitarias confirmaron tres casos de contagio hasta el miércoles por la noche. Se tratan de dos mujeres mayores de 60 años procedentes de Italia y de un hombre de 26 años que volvió al país desde España. Pese al reducido número de casos, la población boliviana ha reaccionado con temor ante la posibilidad de la propagación del virus. El Gobierno de transición, que había declarado la emergencia nacional este miércoles, pidiendo a los residentes en el país que se sometan a “aislamiento voluntario” en caso de haber pasado por uno de los países que padecen la epidemia, decidió suspender todos los vuelos provenientes de Europa desde este fin de semana. En Santa Cruz, ciudad del este del país donde reside una de las mujeres contagiadas, los trabajadores de cuatro hospitales impidieron que sea internada, en una suerte de motín en el que también participaron algunos vecinos de estos centros de salud. La mujer, de 60 años, terminó internada en unas oficinas del Gobierno de la ciudad a la espera de que las autoridades lograsen ingresarla en un hospital. En Oruro, ciudad del oeste del país donde se presentó el segundo caso, se suspendieron las clases, medida que no fue consultada con el Ministerio de Educación, que después desestimó la medida. En Yacuiba, ciudad fronteriza con Argentina, los pobladores bloquearon la carretera para exigir que se controlara a los viajeros provenientes de este país, donde la enfermedad está más extendida.
Ya son 17 los países de la región que han sufrido contagios. Brasil, con 73 casos, es el país del continente con mayor número de diagnósticos confirmados. Le siguen Chile con 33, Costa Rica (22), Argentina (21, dos muertos), México (18), Ecuador (17), Perú (15), Panamá (14, un muerto), Colombia (9) República Dominicana (5), Paraguay (5), Bolivia (3), Cuba (3), Venezuela (2), Honduras (2) y Jamaica (2), Guyana (1, un muerto). Estos datos están actualizados al jueves 12 de marzo, puede consultar el mapa de los contagios elaborado por EL PAÍS siguiendo este enlace.
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