Delhi empieza su lucha contra la polución mientras arde el campo en los Estados vecinos
Las medidas funcionarán hasta marzo de 2019 para mejorar el aire de la capital de la India, el país con las ciudades más contaminadas
El plan de emergencia contra la polución de la capital de India empezó el pasado lunes con la prohibición de los generadores diésel. Mientras, sus más de 20 millones de habitantes han sufrido ya los primeros nueve días con 'pobre' calidad del aire, a principios de este mes. Este es el segundo año que se aplica el Plan de Acción de Respuesta Escalonada (GRAP, por sus siglas en inglés) para Nueva Delhi con la intención de mitigar los efectos de la contaminación en la megalópolis india; que el año pasado tuvo que cerrar sus colegios durante una semana a raíz de una emergencia sanitaria por los niveles de polución tóxica.
“Las medidas anunciadas por el GRAP para luchar contra las categorías de aire 'muy pobre' y 'grave' comienzan el 15 de octubre y continuarán hasta marzo de 2019”, declaró al medio local Hindustan Times, Sunita Narain, miembro de la Autoridad para la Prevención y el Control de la Polución Medioambiental (EPCA, por sus siglas en inglés), nombrado por el Tribunal Supremo de India para poner en marcha el plan en 2017. Narain declaró, sin embargo, que las medidas no afectarán a todo el área metropolitana de Delhi debido a la falta de suministros en las ciudades dormitorio entorno a la capital, Nueva Delhi.
El pasado fin de semana, la Corporación Municipal del Sur de Delhi ordenó parar las actividades de construcción del complejo Pragati Maidan, el mayor proyecto urbanístico de la capital. Mientras que otro miembro de EPCA confesó a Hindustan Times: “El uso de carbón fue prohibido por el gobierno del Estado desde julio. Pero si la calidad del aire baja al nivel de 'grave' en el área metropolitana tendremos que vetar el uso de dichos combustibles contaminantes [diésel] en esas ciudades durante algunos días”.
El domingo, el índice de calidad del aire (AQI) en Nueva Delhi era de 204, lo que se considera 'pobre' según el baremo que establece en 50 el límite admisible; catalogando el aire de 'muy pobre' entre 301-400 y 'grave' entre 401-500. Terminada la época de las lluvias del monzón, las condiciones ambientales se deterioran rápidamente en la capital de India por lo que se espera que las autoridades pongan en marcha otras medidas para cuando se alcance la categoría de 'grave'. Entre ellas, el veto a las actividades de construcción así como la prohibición del uso de trituradoras de piedras y plantas de mezclado en caliente, el aumento del precio de los aparcamientos o la puesta en marcha del plan para el uso de coches con placas pares e impares.
Pese al plan de emergencia de la capital, los Estados vecinos de Haryana y Punjab continúan con la quema anual de rastrojos tras la recolección y de cara a la próxima campaña. El incendio controlado de pastizales es una medida tradicional de los estados agrarios en India y uno de los principales factores que contribuyen a la polución, junto a la contaminación industrial, los gases de vehículos y el polvo de la construcción; agravados por la cercanía de la cordillera del Himalaya, que tiende a atrapar el aire frío invernal en la zona norte de India. De ahí que 14 de los 18 municipios más contaminados del planeta estén localizados al norte de India, según la base de datos de más de 2.600 ciudades elaboradas por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Los análisis de la agencia de salud se basan en la medición de partículas finas (PM-2,5) por metro cúbico de aire, que pueden penetrar en los pulmones y sangre hasta causar enfermedades cardiacas, infartos y cáncer. Considerada capital mundial de la contaminación, Delhi concentra 143 microgramos anuales de esas partículas, lo que multiplica por 14 los niveles de toxicidad atmosférica. A raíz de la crisis del año pasado, el Gobierno Central introdujo algunas medidas para paliar la quema de rastrojos, como la subvención de hasta el 80% de cierta maquinaria agrícola para un tratamiento especial de la paja. Sin embargo, los agricultores de los Estados de Haryana y Punjab consultados por la agencia Reuters indican que el plan no está funcionando.
El viernes pasado, el alcalde de Delhi, Arvind Kerjriwal, dijo que la capital sufriría los mismos problemas que hace un año, cuando él mismo la denominó "cámara de gas" después de que la Asociación India de Medicina declarase la situación de “emergencia sanitaria”. Según el Centro para la Ciencia y el Medio Ambiente (CSE), la contaminación atmosférica es la causa directa de alrededor de 10.000 fallecimientos prematuros al año solo en la capital
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Más información
Archivado En
- Nueva Delhi
- Calidad aire
- Coches diésel
- Delhi
- Gasóleo
- India
- Carburantes
- Contaminación atmosférica
- Asia meridional
- Petróleo
- Coches
- Combustibles fósiles
- Contaminación
- Vehículos
- Ciudades sostenibles
- Problemas ambientales
- Combustibles
- Asia
- Energía no renovable
- Desarrollo sostenible
- Desarrollo urbano
- Fuentes energía
- Transporte
- Urbanismo
- Energía
- Planeta Futuro