Texas, foco del debate sobre el aborto en EE UU
Un juez declara inconstitucional parte de su regulación sobre la interrupción del embarazo, una de las más restrictivas del país
Si un Estado es el foco del debate actual sobre el aborto en Estados Unidos, ese es Texas. Un nuevo paso en pro del derecho al aborto se dio ayer lunes en este Estado cuando un juez federal sentenció que parte de una de las leyes más restrictivas del aborto de la nación, la conocida como House Bill 2, era inconstitucional.
Esto ha permitido que, por lo menos momentáneamente, una docena de clínicas abortivas en este Estado permanezcan abiertas. La regulación que entraba en vigor este martes, tan solo 24 horas después de esta sentencia, requería, entre otras cosas, que los médicos que fueran a practicar un aborto contaran con privilegios de admisión en un hospital a menos de 50 kilómetros de distancia.
“Esta parte de la House Bill 2 no explica una relación convincente y demostrable entre el derecho legítimo del Estado de preservar y promover la vida del feto y la salud de la mujer y, en cualquier caso, supone un obstáculo sustancial para que esta pueda abortar en el caso de que el feto no sea viable y provoca una sobrecarga emocional extra para ella”, explicó el juez Lee Yakel, de Austin, en su sentencia.
“Los privilegios de admisión no tienen ninguna relación racional para una mejora de los resultados del paciente”, añadió. La decisión ha sido una victoria de aquellos que respaldan los derechos del aborto y hubiera provocado que un tercio de las 36 clínicas del Estado hubieran amanecido este martes cerradas.
Esta parte de la House Bill 2 no explica una relación convincente y demostrable entre el derecho legítimo del Estado de preservar y promover la vida del feto y la salud de la mujer”, explica el juez
El fallo se refiere a una demanda interpuesta por Planned Parenthood, organización sin ánimo de lucro que lucha por los derechos reproductivos de las mujeres en EE UU y la Unión Americana de Libertades Civiles; un juicio que ha enfrentado a grupos pro derecho a abortar, los que alegaban que las disposiciones de esta ley tendrían efectos “dramáticos y draconianos” en el acceso de las mujeres a la interrupción del embarazo, y a aquellos que aseguraban “que estas predicciones son exageradas y que las medidas están destinadas a que en el Estado se proteja la vida del feto”.
La resolución, presumiblemente, va a ser apelada en el Quinto Circuito de Nueva Orleans por el equipo de Gobierno de Rick Perry, gobernador de este Estado, aunque Yakel aseguró que “al final del día, estos temas no se van a decidir en este tribunal, se hará en un Circuito de Apelaciones o, incluso, el Tribunal Supremo de EE UU”. “Seguiremos luchando para que la ley se aplique totalmente, porque esta regulación refleja los valores morales y éticos de los texanos”, explicó Perry al enterarse de la noticia.
Sin embargo, el juez Yakel respaldó que el Estado pueda regular cómo un médico prescribe la píldora del día después, por lo que bloqueó indefinidamente la regulación que permitía a estos profesionales seguir las instrucciones de la Agencia del Medicamento de EE UU en relación a este medicamento, que permite la interrupción del embarazo 72 horas después de la concepción.
Además, la demanda no denunciaba otros puntos polémicos de la ley, como el requisito de que todas las clínicas deben disponer de todos los utensilios y servicios con los que cuenta un quirófano, que no entrará en vigor hasta septiembre de 2014, ni la prohibición de abortar pasadas las 20 semanas desde la concepción, algo que sí ha entrado en vigor este martes.
Perry, que en más de una ocasión ha declarado que espera que el “aborto sea una cosa del pasado”, firmó dicha ley el pasado mes de julio, regulación que había sido paralizada con anterioridad por Wendy Davis, demócrata que aplicó un acto de filibusterismo, por el que habló durante más de 11 horas sin parar para evitar la votación de la ley. Esta senadora ahora es candidata para gobernadora de Texas.
Seguiremos luchando para que la ley se aplique totalmente, porque esta regulación refleja los valores morales y éticos de los texanos”
Gobernador de Texas, Rick Perry
La acción de Davis obligó a Perry a llamar a otra votación en la cámara alta para poder pasar la ley. Texas se convirtió en el séptimo Estado en aprobar una ley de aborto restrictiva en EE UU este 2013 y en el doceavo en prohibir abortar tras las 20 semanas. Lo acompañan en la lucha en contra de la interrupción del embarazo Misisipi, Ohio, Oklahoma, Kansas, Wisconsin y Arizona.
Tribunales de Alabama, Misisipi, Dakota del Norte y Wisconsin ya han bloqueado parte de los requerimientos de sus leyes abortivas, de las más restrictivas del país, como muestra de la continua batalla al respecto en muchos Estados y que desafían claramente la decisión de 1973 tomada por el Alto Tribunal con respecto al aborto, tras el caso de Roe contra Wade.
La resolución de los nueve jueces sentenciaron que el aborto era un derecho constitucional. Así, la interrupción del embarazo debe estar permitida para la mujer por cualquier razón y hasta el momento en que el feto es viable, es decir, sea potencialmente capaz de vivir fuera del útero materno, sin ayuda artificial. Lo que los nueve jueces del Alto Tribunal situaron alrededor de las 24 semanas. Aquella resolución, además, impedía prohibirlo en los Estados que conforman la nación.
Asimismo, estas legislaciones también se enfrentan a la opinión mayoritaria de los estadounidenses. El pasado mes de enero, y por primera vez en la historia, la mayoría de ciudadanos (un 54%) dijo que "la interrupción del embarazo debería ser legal en la mayoría de los casos", y más del 70% concluyó que dicha norma "no debía ser modificada"; el porcentaje más alto desde 1989, de acuerdo con una encuesta elaboraba conjuntamente por The Wall Street Journal y NBC News.
A pesar de estos datos, décadas de después, los expertos argumentan que el derecho al aborto se enfrenta a medidas más restrictivas que en 1973, y la lucha entre detractores y aquellos que lo respaldan parece que no tiene fin y que va a seguir muy viva por meses.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.