El negocio de aprender a respirar, la nueva obsesión de la industria del bienestar
Dos expertos en la materia aseguran que es posible cambiar la forma en la que se respira. Ambos explican las claves para dominar la práctica y señalan sus ventajas en lo que ya han bautizado como la nueva meditación, un negocio que mucho dinero a través de libros, cursos y aplicaciones
Lo habitual es dar la respiración por sentada y no considerarla más que una acción rutinaria de nuestro cuerpo. Sin embargo, también gestiona emociones, desintoxica cuerpo y mente, regula estados de ánimo y libera energía estancada. Basta con echar un vistazo a las librerías para descubrir que muchas personas empiezan a darle a la respiración la importancia que tiene. Hay tal cantidad de publicaciones, ejercicios, workshops e incluso programas con los que aprender a respirar que todo parece indicar que se trata de un fenómeno parecido al momento en el que la humanidad entendió que para mantenerse bien física y mentalmente era imprescindible dormir lo suficiente.
La psicóloga Catalina Rojas Benedetti, especializada en estados alterados de conciencia a través de técnicas de respiración, imparte sesiones de breathwork, una técnica de respiración consciente con la que desbloquear cuerpo, la mente y emociones al acceder a las memorias. Asegura que esta práctica no solo mejora el bienestar físico y emocional, sino que también puede ser una puerta de entrada a la exploración espiritual para la que no se requiere ninguna preparación previa. Sus sesiones duran aproximadamente una hora, y se realizan respirando por la boca y con el pecho de forma circular y conectada. “Durante la sesión, la respiración constante y controlada genera diferentes sensaciones corporales que pueden abrir memorias y emociones almacenadas en el cuerpo. A medida que estas emociones se manifiestan, se pone énfasis en la exhalación para facilitar su liberación”, explica a S Moda. Considera que el breathwork pronto será la nueva meditación o el nuevo yoga.
Por descontado, Gwyneth Paltrow ya se ha interesado en las bondades de la respiración. En Goop Summit, congresos centrados en el bienestar que organiza su empresa de estilo de vida, intervino Ashley Neese, gurú de la respiración que imparte clases de breathwork a los empleados de Paltrow, una prueba más de que la respiración ya ha comenzado a interesar a las grandes corporaciones, que confían en ayude a sus empleados a enfocar sus mentes y hacer frente al estrés diario de su trabajo. El ex marido de Gwyneth Paltrow, Chris Martin, también venera al gurú de respiración Patrick McKeown, gracias a quien, asegura, es capaz de actuar en sus plenas capacidades tras haber leído el libro El poder del oxígeno: Técnicas de respiración sencillas y científicamente probadas que revolucionarán tu salud y tu forma física, donde enseña métodos con los que contrarrestar los malos hábitos respiratorios.
La preocupación por respirar correctamente es real y con ella han empezado a surgir aplicaciones para dominar el tema. Y gurús de la respiración como Vivian Rosenthal, cuyas sesiones de breathwork cuestan 400 euros, demuestran que cada vez más personas están dispuestas a pagar auténticas fortunas para dominar la respiración consciente. De hecho, el último protocolo incorporado en SHA Wellness Clinic es Transformative breathing, que combina los beneficios del baño de hielo (que por supuesto, Paltrow ya ha probado, como demostró en Netflix con The Goop Lab With Gwyneth Paltrow) con el poder terapéutico de la respiración. La experiencia Breath for Wellness consiste en una consulta con la Dra. Cinthya Molina, psicóloga en SHA Wellness Clinic, que explica la importancia de una correcta respiración en todas las áreas del cuerpo y sus beneficios, seguido de una sesión de mind and body en la que se enseñan las técnicas respiratorias necesarias tanto para este tratamiento, como para el día a día. ¿El precio de Transformative breathing? 940 euros. Al parecer, respirar bien no sólo no es tan intuitivo como pudiera parecer, sino que tampoco es barato.
Catalina Rojas Benedetti señala que la gente respira en su mínima potencia, es decir, de manera superficial y con la única finalidad de mantenerse viva, sin aprovechar por ello todos los beneficios de una respiración profunda y consciente. “Estas técnicas mejoran la oxigenación, reducen el estrés y aumentan nuestra energía y bienestar en general”, explica.
Considera que inmersos en una sociedad que teme sentir, la respiración puede reconciliar a la gente con sus emociones, pues asegura que la respiración está totalmente relacionada con su manejo. “La forma en que respiramos refleja el estado emocional en el que nos encontramos. Cuando respiramos conscientemente, activamos instantáneamente la conexión con nuestro cuerpo. A través de él podemos permitirnos sentir. Cuando tememos sentir, lo que en realidad estamos haciendo es generar tensiones en el cuerpo, bloqueos energéticos, que no permiten que esas emociones se manifiesten. Mediante la respiración, podemos empezar a relacionarnos con ellas de forma sana y directa”, dice la autora de El espíritu de la respiración, un libro en el que ofrece herramientas prácticas para reeducar la forma de respirar.
Iván Sánchez, terapeuta de respiración consciente, señala que los únicos que respiran bien son los bebés recién nacidos. “Inhibir la respiración permite aliviar temporalmente cualquier tipo de molestia, dolor físico o emocional. La manera más efectiva de mejorar el mecanismo respiratorio es corregir las desviaciones de la respiración y aprender a liberar las sensaciones molestas del cuerpo respirando con un terapeuta especializado”, señala el autor de Sanar la ansiedad. Técnicas de respiración consciente y desarrollo personal para transformar la ansiedad en la vida que deseas.
Para terminar, ¿es necesario estar predispuesto a creer y confiar en las bondades de la respiración consciente o incluso quien acuda con cierta incredulidad y escepticismo a alguna de estas sesiones, cambiará de parecer? “Lo mejor del breathwork es que sus efectos se experimentan de manera directa y personal. Incluso aquellos que acuden con escepticismo pueden descubrir en una sesión que la respiración tiene un poder casi mágico. Al experimentar la energía que se puede generar y sentir cómo se expanden los sentidos, muchas personas encuentran que sus ideas preconcebidas se transforman. La práctica habla por sí misma, y la experiencia personal es la mejor manera de conectar y experimentar sus beneficios”, asegura Catalina Rojas Benedetti. “Nuestro patrón respiratorio es un reflejo de nuestras creencias y de la percepción que tenemos del mundo. Podemos cambiar de forma consciente la forma en que respiramos. Por lo tanto, cambiando nuestro patrón respiratorio podemos enviar a nuestro cerebro nueva información sobre cómo queremos vivir. Si respiramos de forma pausada, lenta, profunda, el cerebro empieza a entender que hay tiempo, que podemos estar presentes, que estamos a salvo y que todo está bien. Esto es muy reparador y sanador”, dice para terminar.
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