El Gobierno vasco arremete contra la falsa voluntad negociadora de Bildu

El Gobierno vasco se ha dirigido este jueves en términos muy críticos a EH Bildu para reprocharle su "falta de honestidad" y su "nula" voluntad de lograr un acuerdo sobre los presupuestos vascos de 2019, que han sido finalmente retirados por el Ejecutivo tras fracasar las negociaciones con la coalición abertzale. El lehendakari, Iñigo Urkullu, y el consejero de Hacienda, Pedro Azpiazu, han admitido este jueves estar "decepcionados" y lamentado que "la parte más radical" de EH Bildu ha frustrado el pacto. "No ha querido negociar, sino solo aparentar", ha manifestado el mandatario vasco.

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El Ejecutivo autonómico ha aprobado esta mañana en un consejo extraordinario la retirada del proyecto presupuestario, una decisión forzada por la falta de entendimiento con la formación soberanista, lo que le obliga a prorrogar las cuentas de este ejercicio. "La actitud de EH Bildu no es compatible con el supuesto de voluntad real negociadora. No ha habido honestidad ni siquiera en las formas. Sus quiebras internas han hecho que la parte más radical en sus posturas haya frenado un buen acuerdo para Euskadi", ha afirmado Azpiazu.

El incremento de las pensiones más bajas mediante un complemento de la Renta de Garantía de Ingresos y el compromiso de fijar un salario mínimo de 1.200 euros en los contratos de la Administración vasca han sido los dos principales escollos en las siete reuniones y cinco propuestas que han manejado el Gobierno y EH Bildu durante el proceso negociador.

Urkullu ha criticado que la coalición que dirige Arnaldo Otegi "no ha sido honesta" y "ha jugado con las expectativas de los pensionistas de buena fe". "Hemos acercado posturas y respondido a las demandas con responsabilidad, pero el final ha sido decepcionante porque, en cuanto hemos atendido sus demandas, han vuelto a sus posiciones maximalistas originales", ha aseverado el lehendakari. Eh Bildu exigía establecer en 858 euros mensuales las pensiones más bajas a partir de 2019. En la última oferta, el Departamento de Hacienda aceptaba una subida progresiva de las pensiones hasta alcanzar dicha cifra en 2021, ya en la siguiente legislatura.

"Ha habido una falta de respeto con la actitud del Gobierno vasco por parte de EH Bildu", ha dicho el consejero de Hacienda, quien ha atribuido el desenlace final al "pánico escénico" y al "cálculo electoral" de los abertzales. Para sostener esta afirmación, Azpiazu ha desvelado que a la última propuesta entregada este miércoles por el Gobierno, EH Bildu respondió "con el mismo papel que entregaron el lunes, con fecha de lunes", lo que llevaba la negociación "al punto de salida". "Han querido convertirse en el paladín de los pensionistas vascos, apropiándose de sus reivindicaciones", ha añadido.

Azpiazu ha advertido de las "limitaciones" de la prórroga presupuestaria, pero ha lanzado un mensaje de tranquilidad porque el Gobierno vasco tratará de "aminorar" sus efectos. Entre otras consecuencias, el Ejecutivo no podrá aplicar una subida del 2,25% en los sueldos de los 90.000 funcionarios vascos, como recogía el proyecto económico que ha sido retirado, salvo que el Parlamento apruebe una línea de crédito que habilite esa partida.

La "espantada" presupuestaria de EH Bildu, como ha calificado el consejero, ha causado malestar en el PNV, que había enfocado toda su estrategia negociadora en un pacto con los soberanistas. El presidente de los nacionalistas vascos, Andoni Ortuzar, ha acusado a EH Bildu de "cargarse" las cuentas de 2019 pese a que un sector de esta coalición era partidaria de sellar un acuerdo. "Todavía está mucho más cómoda detrás de la pancarta gritando, que implicándose para solucionar los problemas", ha afirmado. Y ha añadido: "Había pensionistas que hubieran podido mejorar su pensión a partir de enero 50 euros al mes, y el año siguiente en 100 euros, hasta situarse en los 858 en 2021. Y ahora cero. Esa es la gran operación que ha hecho Bildu al cargarse este presupuesto".