Estos son los siete líderes del ‘procés’ huidos de España

El expresident Carles Puigdemont huyó a Bélgica el pasado octubre, después de que se aplicara el artículo 155 y fuera destituido de su cargo. La Guardia Civil considera al expresidente fugado a Bélgica “máximo responsable”, junto al exvicepresidente Oriol Junqueras de “activar la vía unilateral” que desembocó en la declaración de independencia del 27 de octubre. El 3 de noviembre, la juez de la Audiencia Nacional Carmen Lamela dictó una orden de detención internacional contra él por permanecer en Bruselas y desoír la citación judicial para declarar como imputado por rebelión, sedición y malversación de fondos tras la querella de la Fiscalía del Estado.

Más tarde, el Tribunal Supremo retiró la euroorden que pesaba sobre él y el resto de los exconsellers huidos. El pasado 1 de marzo, Puigdemont, que fue elegido diputado por Junts per Catalunya en las elecciones del 21 de diciembre, renunció "provisionalmente" a presidir la Generalitat. Puigdemont fue detenido en Alemania cuando intentaba llegar en coche a Bélgica desde Finlandia el pasado 25 de marzo y permaneció 10 días en prisión. En estos momentos reside en Hamburgo. El juez del Tribunal Supremo, Pablo Llarena, le ha procesado por los delitos de rebelión y malversación de caudales públicos.

En Bélgica también está fugada la exconsejera de Agricultura, Pesca y Ganadería Meritxell Serret, quien renunció a su escaño el pasado 29 de enero para ayudar a conseguir una mayoría independentista en el Parlamento catalán. El juez Pablo Llarena la procesó en marzo por los delitos de malversación de caudales públicos y desobediencia. La justicia belga, al igual que en el caso de Toni Comín y de Lluís Pérez Gordi, ha denegado la petición de extradición.

Toni Comín, exconsejero de Salud de la Generalitat, es otro de los líderes independentistas fugados en Bruselas. Lamela dictó una orden de detención internacional contra él por permanecer en la capital belga y desoír la citación judicial para declarar como imputada por rebelión, sedición y malversación de fondos tras la querella de la Fiscalía del Estado. El juez Llarena le ha procesado por los delitos de rebelión y malversación.

Lluís Puig, exconsejero de Cultura, huido en Bélgica, renunció el pasado 29 de enero a su escaño para ayudar a conseguir una mayoría independentista en el Parlamento catalán. La justicia española dictó una orden de detención internacional contra él por desoír la citación judicial para declarar como imputado por rebelión, sedición y malversación de fondos tras la querella de la Fiscalía del Estado. El juez belga rechazó el pasado 16 de mayo la entrega a España de los exconsejeros huidos a Bélgica, Comín, Serret y Puig. El tribunal de primera instancia escuchó la petición de la fiscalía, que consideraba que la euroorden no cumplía con los requisitos necesarios para su tramitación. El juez Llarena le ha procesado por malversación de caudales públicos y desobediencia.

La exconsejera de Educación Clara Ponsatí dejó España y huyó a Bélgica el pasado noviembre. A principios de marzo la exconsellera, que en febrero renunció a su escaño, se trasladó a Reino Unido para incorporarse como profesora en la Universidad de Saint Andrews, en Escocia. El juez Pablo Llarena le ha imputado los delitos de rebelión y malversación. Ponsatí está pendiente de que este lunes, 23 de julio la justicia escocesa decida sobre su situación. La fiscalía escocesa ve equiparable el delito de rebelión del código penal español al delito de traición en el Reino Unido.

La exportavoz de la CUP Anna Gabriel huyó a Suiza el pasado febrero. El juez Llarena le imputó un delito de rebelión el pasado 22 de diciembre. El magistrado amplió la investigación hacia el PDeCAT, ERC y la CUP por su grado de implicación en las decisiones tomadas durante el procés. El pasado 20 de febrero, Gabriel comunicó su decisión de no comparecer ante Llarena hasta "tener garantías de la celebración de un proceso justo", después de trasladarse a Suiza. El Gobierno federal suizo informó de que no extraditaría a la exdiputada. El juez Llarena le imputa un delito de desobediencia.

La secretaria general de Esquerra Republicana, Marta Rovira, engrosó el viernes 23 de marzo la lista de dirigentes del proceso independentista huidos de España para eludir la acción de la justicia. Rovira no se presentó a declarar ante el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena y emitió un comunicado en el que afirmaba que se marchaba al “camino del exilio”. Al igual que la exdiputada de la CUP Anna Gabriel, Rovira se instaló en Suiza. Al día siguiente de su huida, el juez cursó una orden europea e internacional de detención. El juez Llarena la ha procesado por un delito de rebelión.