Rivera llama al presidente de la gestora del PSOE para ofrecerse a mediar con el PP

Albert Rivera, líder de Ciudadanos, ha telefoneado este martes a Javier Fernández, presidente de la gestora del PSOE, para ofrecerle su intermediación si los socialistas deciden abrir negociaciones con el PP para facilitar con su abstención la formación de Gobierno. La dirección de Ciudadanos lleva meses intentando convencer al PSOE de que los dos partidos podrían marcar desde la oposición la agenda del Ejecutivo de Mariano Rajoy. Ese argumento no ha tenido ningún eco en las filas socialistas mientras Pedro Sánchez ha estado al frente. Sin embargo, la dimisión del hasta ahora secretario general de los socialistas abre un nuevo escenario.

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"He hablado con Javier Fernández, me he puesto en contacto con él, le he deseado suerte, acierto en la toma de decisiones, y he manifestado respeto por los mecanismos internos de su partido", ha resumido Rivera sobre su conversación con el presidente de la gestora. "Le he trasladado respeto a su proceso interno, porque van a tomar decisiones que nos afectan a todos, y me he puesto a su disposición por si cree que somos necesarios para alguna negociación, para poner en marcha este país o para desbloquear. Me ha agradecido la llamada y la predisposición", ha añadido. Y ha subrayado: "Hoy estamos más cerca que hace unos días de que este país se ponga en marcha. Ya no hay excusas. Al señor Rajoy no le va a caer la presidencia del cielo. Tiene que ir a buscarla. Es legítimo que si el PSOE tiene ese debate interno también pueda exigir condiciones al PP".

Rivera firmó en febrero un acuerdo de Gobierno con Sánchez. Ambos defendieron ese pacto durante meses. Las elecciones del 26-J marcaron un punto y aparte en su relación. Sus intereses divergentes con respecto a la investidura de Rajoy como presidente les llevó a separarse. Sánchez dejó para el final la llamada a Rivera cuando emprendió el proyecto de formar un Gobierno alternativo que uniera al PSOE, a Podemos y a Ciudadanos. La conversación nunca se produjo oficialmente. Rivera bloqueó cualquier opción de que la idea de Sánchez cuajara al criticarla en público e incluso remitirle a debatir antes con los líderes territoriales socialistas.

La dimisión del ya ex secretario general abre una nueva etapa en la relación entre el PSOE y Ciudadanos. El primer capítulo se ha escrito este martes con la llamada de Rivera, que ha mantenido el espíritu de siempre: el líder de la cuarta fuerza política de España se ofrece a mediar entre los representantes de la primera y la segunda, que podrían resolver la situación con un pacto bilateral.