La Audiencia rebaja 500.000 euros la fianza a la antigua cúpula de Bankia

La Audiencia Nacional ha rebajado en medio millón de euros la fianza civil de 34 millones que impuso a Bankia y su matriz, BFA, así como a cuatro de sus máximos responsables, entre ellos su expresidente Rodrigo Rato, por presuntas irregularidades en su salida a bolsa. La sección tercera de la Sala de lo Penal ha atendido la solicitud que la entidad les formuló el pasado junio, cuando alegó que solo se podían retener en cuenta las cantidades que habían reclamado los accionistas personados en la causa y no otras.

Los magistrados han ordenado, además, que se devuelva a cada uno de los imputados a los que afectó la medida (Bankia, BFA, Rato, José Manuel Fernández Norniella, José Luis Olivas y Francisco Verdú) 90.194 euros, una sexta parte de la cifra total, ya que pagaron la fianza de forma solidaria a partes iguales.

Según Bankia, cuando el tribunal hizo el cálculo de 34 millones de fianza para Bankia, incluyó a dos inversores que adquirieron los títulos fruto del canje de preferentes y deuda subordinada, "hecho que no es objeto del presente procedimiento", que está delimitado a los que compraron acciones en la Oferta Pública de Suscripción (OPS). La Audiencia comparte este argumento y recuerda que el caso Bankia cuenta con una pieza separada en la que ya se investiga la emisión de preferentes, en la que está imputada la cúpula de Caja Madrid.

El instructor de la causa, Fernando Andreu, se había negado a hacer cualquier cambio de la fianza porque él no puede modificar las resoluciones dictadas por su instancia superior, la Sala de lo Penal, motivo por el que la entidad interpuso un recurso en apelación. El pasado abril, la Sala de lo Penal ya rebajó en un 96% la fianza civil impuesta de 800 millones impuesta por Andreu para dejarla en los 34 millones que ahora vuelve a rebajar. Los 34 millones equivalían, según la Audiencia, al dinero perdido por los accionistas minoritarios que se han personado en la causa y que reclamaron la cantidad en una vista celebrada el 6 de febrero, y no el perjuicio del conjunto de pequeños inversores que había tenido en cuenta Andreu.