Rubalcaba cree que la Ley Wert “fractura el sistema educativo”
La Universidad “es buena para formar funcionarios y no tanto para empresarios”, defiende
El exsecretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha analizado este lunes “algunas ideas recibidas” sobre educación para intentar derribar tópicos. Defiende que la Universidad pública “mejorable es pero mediocre no”, aunque admite que con su sistema eminentemente memorístico sirve “para formar funcionarios pero no tanto para formar empresarios”. En la inauguración de unas jornadas universitarias en Sevilla, el también exministro de Educación ha arremetido contra la Ley Wert. Considera que la última reforma educativa, encabezada por el ministro José Ignacio Wert es la más ideológica de todas” y “fractura el sistema educativo” en 17 modelos, uno por comunidad autónoma.
Críticas a PISA
El político socialista se suma a los críticos crecientes del informe PISA, la evaluación que hace la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) a alumnos adolescentes. Considera que las autoridades educativas hacen un uso “desproporcionado de sus resultados” y que se presentan "como si fuera la clasificación de la Liga de Fútbol o el Festival de Eurovisión" y que no se destaque que, como también recoge PISA, España tiene uno de los sistemas más equitativos de los analizados.
Rubalcaba considera que esta ley, que comenzó a implantarse en las aulas el pasado septiembre, conlleva el riesgo de que se cree un sistema en cada región "de primero de Primaria a tercero de Secundaria Obligatoria" porque permite que cada una elabore sus propios currículos. Otro tanto ocurre en la Universidad, añade, con la supresión de las pruebas de Selectividad (prevista a partir de 2017), las diferencias de tarifas universitarias “que hace que un grado en Barcelona o Madrid cueste entre el doble y el triple de lo que vale en Sevilla o en Santiago” o el nuevo decreto de universidades, el conocido como 3+2, que permitirá a cada campus tener una duración distinta para sus titulaciones.
El profesor Pérez Rubalcaba volvió el pasado septiembre a su plaza de titular de Química Orgánica en la Complutense de Madrid tras abandonar la primera línea política. Este lunes ha pronunciado la conferencia inaugural de la segunda edición de Factor Universitario, las jornadas organizadas por el Centro de Iniciativas Culturales de la Universidad de Sevilla (CICUS) bajo el título “¿Qué universidad queremos?” y que ha convocado a expertos de distintos ámbitos. Durante su intervención, ha negado en varias ocasiones que quisiera enarbolar una defensa del 'statu quo’ pero sí "poner las cosas en su sitio".
Basándose en el Diccionario de Ideas recibidas de Gustave Flaubert, su intervención pretendía derribar lugares comunes que, en algunos casos, “son estrategias políticas”. Entre otros, ha rechazado que los becarios tengan malas notas, que los estudiantes españoles actuales sean peores que los de antes o la “insostenibilidad” del sistema universitario sobre la que ahondó recientemente la secretaria de Estado de Educación, Montserrat Gomendio.
Sí a la privada, no a los chiringuitos
El exdirigente socialista coincide con Gomendio en que la Universidad española debería estar especializada. Y, como ha dicho ella públicamente, no cree que sobren campus. Pero da un paso más y defiende crear más universidades para que tanto los jóvenes como los trabajadores que quieran reciclarse puedan “aprender, desaprender y reaprender”. Dice el químico que la endogamia universitaria es como el colesterol “existe buena y mala". “Lo que sucede es que cuando la endogamia se convierte en norma, entonces sí, entonces puede ser nefasta”, añade. Y apoya la creación de universidades privadas –las leyes que impulsaron las dos primeras las presentó él mismo en las Cortes, según ha recordado- pero siempre que no sean "chiringuitos que dan títulos oficiales".
El rector de la Universidad de Sevilla, Antonio Ramírez de Arellano, también ha defendido en su presentación del profesor de Química Orgánica que no se opone a la creación de campus privados "siempre que sean realmente universidades y se rijan por parámetros de calidad similares a los nuestros".
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