Imputado por prevaricación y fraude un exembajador español en Congo

El titular del Juzgado Central de Instrucción número 2 de la Audiencia Nacional, Ismael Moreno, ha imputado por los presuntos delitos de prevaricación y cohecho al exembajador de España en la República Democrática de Congo (RDC) Antonio Fernández de Mazarambroz, al que se investiga por la supuesta venta de visados a ciudadanos de dicho país africano por casi 3.000 euros cada uno. Moreno admitió a trámite en junio pasado una querella de la Fiscalía de la Audiencia Nacional, ante la que el Ministerio de Asuntos Exteriores denunció las presuntas irregularidades en la legación diplomática española en Kinshasa.

Fernández de Mazarambroz fue destituido el pasado 31 de enero, cuando llevaba solo 20 meses como embajador en la RDC. Aunque su cese su presentó entonces como un relevo normal en un puesto de libre designación —incluso se le agradecieron los “servicios prestados” y siguió un mes al frente de la Embajada para despedirse de sus subordinados y recoger sus pertenencias—, una investigación interna ordenada por la Subsecretaría del Ministerio de Exteriores apuntó a la existencia de múltiples irregularidades.

Las alarmas se encendieron, según dicha investigación. cuando la policía empezó a rechazar en frontera a ciudadanos congoleños sospechosos de dedicarse a actividades ilícitas que venían con visado expedido por la Embajada en Kinshasa. De hecho, el número de visados creció sustancialmente y pasó de 981 en 2011 a 2317 en 2013, según una respuesta parlamentaria del Gobierno a Amaiur.

Varios ciudadanos congoleños, según la investigación de Exteriores, denunciaron ante la Procuraduría de dicho país haber pagado unos 4.000 dólares (2.900 euros) al embajador español o a personas de su entorno a cambio del visado. Mazarambroz siempre negó haber recibido dinero y alegó que el aumento de los visados se debió al deseo de potenciar las relaciones económicas bilaterales y facilitar la visita a España de hombres de negocios de la RDC.

"Niego la mayor. Defenderé mi inocencia ante el juez", alega el diplomático español

El diplomático y el entonces subsecretario de Exteriores, Rafael Mendívil, protagonizaron un tenso careo en abril pasado en un programa de 13TV, en el que el primero expresó su convencimiento de que se habían producido irregularidades en la Embajada española en Kinsasha, admitiendo así que no se habría tratado de un relevo normal. Mendívil reprochó a Mazarambroz que hubiera asumido personalmente la tramitación de los visados —una competencia que correspondía al número dos de la Embajada— y desobedecido sus reiterados avisos para que pusiera fin a esta situación. Mazarambroz presentó una demanda de protección del honor contra su superior.

Tras el cese del embajador, Exteriores cambió a todo el personal de la legación española en Kinshaasa, no porque sospechase de su implicación en el presunto fraude sino porque temía por su seguridad. Finalmente, el Consejo de Ministros del pasado 16 de mayo nombró al diplomático Javier Hergueta como nuevo embajador en la RDC. Ayer, durante su comparecencia ante la Comisión de Exteriores del Congreso —un trámite previsto por la ley de Acción Exterior para los nuevos embajadores— Helgueta reveló que el juez había admitido a trámite la querella de la Fiscalía por prevaricación y fraude presentada por el fiscal.

“Es un caso que nos ha hecho mucho daño. Da una mala imagen de España”, dijo Helgueta, en alusión a la supuesta venta de visados. Añadió que sus primeros meses en el puesto los había dedidicado a “una gran operación de imagen para cambiar en lo posible esa percepción”.

Por su parte, Mazarambroz reconoció anoche que se le ha notificado la imputación y está a la espera de que se fije día y hora para declarar. “Niego la mayor de manera total y absoluta. Defenderé ante el juez mi inocencia y la gestión ejemplar de la Embajada”, agregó. Desde su regreso de Congo, el diplomático está a la espera de que se le asigne destino, pero no ha sido expedientado ni sancionado.

No era la primera vez que el exembajador es cesado de un cargo fuera de España. En 1987 fue destituido de su cargo como cónsul de Nador (Marruecos) por excederse supuestamente en sus atribuciones consulares.