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Hacienda endurece el objetivo respecto a Bruselas pero establece excepciones

El Gobierno reduce al 0% el objetivo de déficit estructural a partir de 2020, salvo en dos supuestos

Jesús Sérvulo González
Cristobal Montoro y Soraya Sáenz de Santamaría, en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros.
Cristobal Montoro y Soraya Sáenz de Santamaría, en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros.Uly Martín

El verano pasado los dos principales grupos políticos del país (PP y PSOE) acordaron, tras horas de negociación, modificar la Constitución para introducir en ella el principio de estabilidad presupuestaria. El pacto político se materializó en el artículo 135 de la Ley Fundamental, que desarrolla los preceptos de equilibrio presupuestario. El punto dos de dicho artículo señala: “El Estado y las comunidades autónomas no podrán incurrir en un déficit estructural que supere los márgenes establecidos, en su caso, por la Unión Europea para sus Estados miembros. Una Ley orgánica fijará el déficit estructural máximo permitido al Estado y a las comunidades autónomas, en relación con su Producto Interior Bruto. Las entidades locales deberán presentar equilibrio presupuestario”.

El acuerdo alcanzado entre socialistas y populares el pasado 25 de agosto para reformar la constitución fijaba el 31 de diciembre de este año como el plazo máximo para aprobar la Ley orgánica, a la que se refería la Constitución.

El Gobierno popular que preside Mariano Rajoy presentó ayer el anteproyecto de la citada norma que ha bautizado como Ley de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera, que ata en corto a las autonomías para evitar que incurran en déficit estructural y mantengan controlada la deuda pública.

El Ejecutivo reduce al 0% el objetivo de déficit estructural —aquel corregido por los efectos del ciclo económico— a partir de 2020 y se salta el acuerdo alcanzado por PP y PSOE hace cuatro meses. Entonces, ambos partidos pactaron fijar el déficit estructural en el 0,4% a partir de 2020. Este se distribuiría de la siguiente forma: El desfase del Estado estaba limitado al 0,26%, las comunidades autónomas no podrían sobrepasar el 0,14% del PIB, y las entidades locales debían alcanzar equilibrio presupuestario. Ahora ninguna de las administraciones podrá incurrir en déficit a partir de 2020.

El objetivo de déficit estructural fijado por el ministerio de Hacienda incluye dos excepciones: “Se podrá alcanzar un déficit del 0,4% en caso de reformas estructurales con efectos presupuestarios a largo plazo”. Y, además, “en situaciones excepcionales como catástrofes naturales, recesión económica o situación de emergencia extraordinaria”.

Con el nuevo límite de déficit estructural fijado ayer por el Gobierno, España será más dura que Bruselas con la regla de oro del déficit. Alemania fue el primer país de la zona euro en incluir esta regla de oro en su Constitución, lo hizo en 2009. Y fijó el límite d del déficit en el 0,36%. Bruselas, por su parte, permite a los estados miembros incurrir en un desfase en las cuentas públicas del 0,5%.

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Sobre la firma

Jesús Sérvulo González
Redactor jefe de Economía y Negocios en EL PAÍS. Estudió Económicas y trabajó cinco años como auditor. Ha cubierto la crisis financiera, contado las consecuencias del pinchazo de la burbuja inmobiliaria, el rescate a España y las reformas de las políticas públicas de la última década. Ha cursado el programa de desarrollo directivo (PDD) del IESE.

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