_
_
_
_
SANIDAD

Las prioridades de Ana Mato: sanidad universal e igualdad de oportunidades

La nueva titular de Sanidad evita pronunciar la palabra gratuita en plena polémica por el copago

Ricardo de Querol
La ministra de Sanidad, Ana Mato Adrover.
La ministra de Sanidad, Ana Mato Adrover.Juan Carlos Rojas (AFP)

Ana Mato ha tomado posesión como ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad con sus prioridades puestas en garantizar la sanidad universal y la igualdad de oportunidades –resuelta, dice, en la Constitución pero no en la vida real-, combatir la violencia contra la mujer –“la lacra del siglo XXI”- y apoyar a la familia.

Así lo ha declarado en un acto en el que la han acompañado Luisa Fernanda Rudí, presidenta de Aragón, los exministros José Manuel Romay Becaría e Isabel Tocino y el portavoz del PP, Esteban González Pons, entre otros dirigentes populares. Esperanza Aguirre, presidenta de la Comunidad de Madrid, la ha saludado antes de comenzar un ceremonia llena de cordialidad en la que Leire Pajín, la ministra saliente, le ha entregado la cartera del “ministerio del Estado de Bienestar”, dejando claro que Mato la tendrá “como cómplice y como amiga” si la necesita.

La alusión de la nueva ministra a la garantía de la sanidad universal -"Para los ciudadanos la salud es lo primero; para el Gobierno también", dijo- se produce en un momento en que varias comunidades han negado la atención a personas desplazadas, vecinos de comunidades limítrofes o parados de larga duración. No ha pronunciado, sin embargo, la palabra "gratuita" en un momento en el que arrecia la polémica por el copago después de que Cataluña haya introducido una tasa de un euro por fármaco en las recetas.

El Ministerio mantiene la estructura del Gobierno anterior con otro nombre, al reunir las competencias de Sanidad, Servicios Sociales (antes llamada Política Social) e Igualdad, área que ya fue degradada de ministerio a secretaría de Estado en la última remodelación de Zapatero. Ana Mato subrayó en su discurso su compromiso con la igualdad de oportunidades. En contraste con el discurso del Gobierno anterior, evitó la expresión "género" tanto al referirse a los objetivos de igualdad como a la violencia contra las mujeres. Que Igualdad se mantenga en el nombre del ministerio no implica que mantenga su rango: habrá una sola secretaría de Estado para Servicios Sociales e Igualdad.

El departamento de Mato se responsabilizará también de la aplicación, aún incompleta, de la Ley de Dependencia, de la mano de las autonomías. No la citó por su nombre, pero expresó su interés por el bienestar los mayores y los discapacitados. En campaña, Mariano Rajoy había señalado que la Ley de Dependencia "no es viable".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Ricardo de Querol
Es subdirector de EL PAÍS. Ha sido director de 'Cinco Días' y de 'Tribuna de Salamanca'. Licenciado en Ciencias de la Información, ejerce el periodismo desde 1988. Trabajó en 'Ya' y 'Diario 16'. En EL PAÍS ha sido redactor jefe de Sociedad, 'Babelia' y la mesa digital, además de columnista. Autor de ‘La gran fragmentación’ (Arpa).

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_