Rajoy da un paso atrás en su compromiso de aplazar la devolución de los anticipos

Era la principal demanda de los barones del PP y se ha quedado en el aire. Mariano Rajoy ha apartado de su primera reunión con los presidentes autonómicos el tema que más les preocupa y ha dado un paso atrás en su compromiso de aplazar la deuda con el Estado hasta conocer el estado de las cuentas.

Los líderes territoriales esperan que el futuro presidente amplíe finalmente "en torno a diez años" el plazo para las devoluciones que las comunidades autónomas deben a la Administración central por los anticipos de 2008 y 2009. Y esperaban que la reunión de esta mañana abordara esta cuestión. Así lo solicitaron en julio ante el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) y así lo había avanzado por la mañana Juan Manuel Moreno, responsable de política territorial del partido: "Vamos a hacer un plazo en esas devoluciones que puede estar en torno a los diez años para que lo devuelvan al conjunto de la Administración".

De la reunión con los barones -a la que no han asistido el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, el de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, y el líder de los populares vascos, Antonio Basagoiti- ha salido, sin embargo, otro compromiso que no destaca por su concreción. Las autonomías gobernadas por los populares se han comprometido a cumplir los objetivos de déficit, pero no han explicado cómo piensan hacerlo. "El primer planteamiento y compromiso de Rajoy ha sido el cumplimiento del déficit de todos en el Partido Popular", ha señalado sin ofrecer más detalles Javier Arenas, presidente del PP andaluz, al término del cónclave.

Arenas ha esbozado también los otros ejes de la reunión y que conforman el nuevo compromiso del líder del PP con sus barones: "El objetivo de eliminación de duplicidades en las autonomías", que afecta a comunidades y Ayuntamientos y consideran "prioritario" y "una mayor eficiencia en los servicios públicos". "Todos los dirigentes regionales nos comprometemos con leyes de techo de gasto a no gastar más de lo que se ingresa", ha añadido el presidente del PP andaluz una vez más sin explicar cómo. 

La reunión, en cualquier caso, deja claro que el camino de Rajoy antes de su inminente llegada a La Moncloa parece jalonado de otras prioridades que se quedan en un grado de claridad más propio de unas palabras clave. Tras abordar con banqueros y representantes del mundo financiero las medidas que tendrá que adoptar el nuevo Gobierno y después de dar el primer paso hacia la negociación con sindicatos y patronal, ahora le llega el turno a la idea de ahorro. 

La reducción del déficit público será uno de los objetivos del futuro Ejecutivo de Rajoy y, aunque el presidente in pectore no ha hablado públicamente, se encarga de dejarlo claro la secretaria general del partido y presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal. Lo repitió el lunes tras el Comité de Dirección Nacional en Génova: hay que cumplir los objetivos de déficit establecidos al menos para 2012 y para 2013.

En este contexto, la reunión de hoy tenía que marcar una especie de hoja de ruta para la estabilidad de las cuentas autonómicas. No todas las comunidades que gobierna el Partido Popular tras las elecciones del 22 de mayo han presentado todavía sus previsiones presupuestarias para 2012, de momento lo han hecho solo algunas como Extremadura, Baleares o Galicia, donde se recoge la rebaja del gasto público.

Rajoy ha pedido a sus presidentes autonómicos, al margen de que hayan aprobado sus cuentas regionales, que sigan por este camino, ya que la prioridad del Partido Popular, algunas de cuyas comunidades autónomas ofrecen un desequilibrio muy elevado todavía, como Castilla-La Mancha, Murcia o Comunidad Valenciana, consiste en reforzar el compromiso por el descenso de los gastos, ya que con ello pretende transmitir a los mercados, a la Unión Europea, en particular a Angela Merkel, un mensaje de confianza.