Murcia no prevé más recortes

Murcia no volverá a sacar la tijera para controlar el déficit. El presidente Ramón Luis Valcárcel, que el domingo se convirtió en el barón del PP más votado (60%), anunció este jueves que su gobierno no prevé nuevos recortes para controlar el endeudamiento tras el polémico plan de austeridad, que en enero redujo las condiciones laborales de 50.000 funcionarios autonómicos.

Valcárcel se mostró en contra de subir los impuestos a quien más gana -“En Murcia no hay grandes fortunas”, dijo- y negó que su controvertido plan, que movilizó las protestas de miles de murcianos convocados por los sindicatos, afectase a servicios básicos como la educación o la sanidad. “Los recortes no fueron sociales”, aseguró en TVE. La tijera rebajó entonces los complementos a los trabajadores del Servicio Murciano de Salud y los profesores, y congeló la oferta pública de empleo.

Sobre la financiación de la sanidad, Valcárcel se desmarcó del polémico copago, y defendió medidas “imaginativas” como el céntimo sanitario. Anunció también, como medida para hacer caja, la concesión a empresas privadas de las autovías y puertos regionales. Su gobierno prevé ingresar 151 millones de euros con la licitación de los 5.746 amarres, cuya concesión ha vencido o está a punto de hacerlo, y otros 45 por la venta de edificios públicos, como el antiguo Hospital de Arcos, según fuentes de su ejecutivo.

De 'chiringuitos' y gastos

Reforzado por los resultados electorales,  propuso evitar duplicidades. "No tiene sentido que la administración central tenga servicios duplicados con las comunidades y los ayuntamientos, en unos chiringuitos en los que se va una gran cantidad de dinero", dijo.

Valcárcel defendió como medida de austeridad el cierre de las diputaciones. Murcia, como región de una sola provincia, carece de esta institución.